Renault amenazó ayer con abandonar en el 2010 la fórmula 1 en caso de que la Federación Internacional de Automovilismo insista en aplicar una limitación presupuestaria que daría ventajas técnicas a quienes la cumplan.
«La decisión de la FIA de introducir dos niveles de regulación técnica para el 2010 ha causado que el Grupo Renault reconsidere su inscripción en el próximo campeonato», advirtió el fabricante francés en un comunicado. La escudería tomó posición 24 horas después de que Ferrari, uno de sus principales rivales en la categoría, conmocionara en particular a Italia con la noticia de que podría bajarse de la competición en la próxima temporada.
«Schock!!!», tituló La Gazzetta dello Sport , que también manifestó su animadversión hacia la FIA. «Estamos en guerra», escribió el periódico, que quiso reflejar la situación que existe entre Ferrari y una gran parte de los equipos del circuito contra el organismo rector de la categoría automovilística.
El Consejo Mundial de la Federación decidió a finales de abril introducir un límite presupuestario voluntario de 45 millones de euros. Los equipos que se atengan a esa frontera tendrán grandes libertades en los ámbitos del motor y la aerodinámica. Las escuderías que, por el contrario, gasten más dinero, sufrirán limitaciones en su desarrollo técnico, algo que desde Renault y Ferrari consideran injusto. «Queremos reducir costos y mantener los estándares de calidad», advirtió el director del equipo, Flavio Briatore. «Pero nos negamos a aceptar un gobierno unilateral manejado por la FIA. Si las decisiones del consejo mundial no se revisan, no tenemos otra opción que retirarnos de la fórmula 1 a finales del 2009».