El Barcelona intenta aparcar la euforia tras la goleada al Real Madrid que puede valer un campeonato de Liga, para concentrarse en preparar el partido de vuelta de la Liga de Campeones ante el Chelsea en Londres (mañana, a las nueve menos cuarto de la noche).
Guardiola tendrá que preparar batalla contra tres enemigos, el Chelsea, la euforia y las lesiones, y vencer si desea obtener el triunfo en todas las competiciones en las que sigue con opciones. Sin tiempo para las celebraciones, y tras un domingo libre de entrenamientos, el Barcelona pasó el día de ayer pendiente de la lesión de Thierry Henry.
El francés sufrió un golpe en una rodilla ante el Real Madrid y fue sustituido en la segunda parte, después de marcar dos goles y ser uno de los grandes protagonistas de una noche histórica. Su concurso ante el Chelsea está en duda. «No está bien, pero todavía es prematuro descartarlo para el encuentro del Chelsea. Todo depende de su evolución. Aunque si el partido fuera hoy, no podría jugar», informó el Barcelona.
Si se confirma la noticia, Henry se sumaría a las sensibles ausencias de Carlos Puyol, sancionado, y de Rafa Márquez, lesionado para lo que resta de temporada por una rotura de menisco. Aun con la lesión de Henry, lo que más le preocupa a Josep Guardiola, su técnico, son las ausencias en defensa. Para el francés tiene recambios solventes, pero no tanto para sus zagueros.
Así las cosas, el uruguayo Martín Cáceres aparece como la solución más natural para entrar en el equipo. Es un jugador que apenas ha contado para Guardiola esta temporada y que ahora afronta la posibilidad de disputar uno de los partidos más importantes del año.
Con respecto al partido, sorprenden las declaraciones del entrenador del Chelsea, el holandés Guus Hiddink, que admitió que tras el partido de ida de las semifinales de la Liga de Campeones ante el Barcelona «apenas pudo dormir» pensando en la táctica para frenar de nuevo al conjunto español el miércoles en el choque de vuelta en Londres. «Pienso en diferentes formaciones. Esta semana he tenido siempre un bolígrafo y un papel cerca de mi cama. No podía dormir, así que estaba escribiendo cosas», dijo Hiddink.
El Chelsea fue el primer equipo en lograr que el ofensivo Barcelona se quedara sin anotar en su casa en toda la temporada, y el empate sin tantos hace que el pase a la final de la Liga de Campeones se decida mañana en Stamford Bridge.
Los dos últimos en sumarse al carro del protagonismo culé fueron los dos ex entrenadores del Barça, Louis Van Gaal y Johan Cruyff. El primero se adjudicó el descubrimiento de Valdés, Xavi, Puyol e Iniesta. El segundo ha alabado la labor de Josep Guardiola como entrenador y ha destacado la madurez de Samuel Eto'o.