Dennis deja la F-1, como había anunciado, con efecto inmediato

Agencias

DEPORTES

17 abr 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Ron Dennis oficializó ayer su marcha de McLaren, un adiós que ya había anunciado con anterioridad. El inglés, de 61 años, pasará a encabezar McLaren Automotive, otra filial del grupo, que en los próximos meses lanzará una serie de automóviles deportivos de lujo. Dennis cierra un ciclo de 27 años en la fórmula 1 después de lograr el título mundial con el que fue su pupilo preferido, Lewis Hamilton. Asistió al primer gran premio de esta temporada, que se celebró en Melbourne, pero no acudió al de Malasia.

El controvertido Dennis señaló que, «sin duda, el presidente de la FIA, Max Mosley, y el jefe de la fórmula 1, Bernie Ecclestone, no se sentirán disgustados por esta decisión».

Martin Whitmarsh, que ha tomado las riendas del equipo, y el propio Dennis aseguran que esta marcha no está relacionada con la polémica del Gran Premio de Australia, donde los responsables de McLaren y Hamilton mintieron a la Federación Internacional del Automóvil (FIA). El campeón del mundo y su escudería fueron descalificados por ocultar la verdad sobre un adelantamiento del británico al italiano Jarno Trulli (Toyota). El equipo tendrá que dar explicaciones el 29 de abril ante el Consejo Mundial del Automóvil de la FIA.

La renuncia de Whitmarsh

Whitmarsh reconoció ayer que tras el escándalo de Australia llegó a ofrecer su renuncia como jefe de McLaren, pero fue rechazada por sus superiores. «Presenté mi dimisión después de aquel fin de semana, pero fue amablemente rechazada», admitió.

Señaló que no cree que el caso de las mentiras haya enturbiado la relación de Hamilton con el resto de componentes de la escudería y cree que el campeón cuenta con el apoyo de todos los mecánicos e ingenieros.

La prensa inglesa publicó rumores sobre la posible ruptura entre Dennis y la familia del piloto. De hecho, el antiguo jefe de McLaren destacó ayer que todavía se siente muy unido a Hamilton, pero que, como en todas las familias, siempre hay que soportarse mutuamente.