El español Fernando Torres, que ayer jugó como suplente, salvó de nuevo a su equipo, el Liverpool, y le dio una victoria crucial por 2-3 en el tiempo añadido sobre el Portsmouth que lo aúpa de forma temporal al liderato de la Premier.
Los pupilos de Rafa Benítez tuvieron que sudar tinta hasta el último suspiro. El resultado les permite seguir soñando con el título.
Lo cierto es que ayer estuvieron cerca de la derrota, que hubiera supuesto una catástrofe para las aspiraciones de su técnico.
Está claro que, ni siquiera cuando no atraviesa su mejor momento, el ciclón Torres puede dejar de ser crucial para los red.
Al duelo de Fratton Park, el ex del Atlético de Madrid solo se incorporó cuando lo llamó Benítez en el minuto 76, en sustitución de Ryan Babel, y en ese tiempo se las apañó para dar un gol y marcar otro.
Con razón las dudas giraban en torno a la presencia del delantero español en la titularidad de Benítez antes del pitido inicial. Benítez ya había avisado la víspera de que evaluaría la forma física de Torres el mismo día del partido, y ayer también empezaron como suplentes los también españoles Albert Riera y Xabi Alonso.
Magistral Arteta
Por su parte, Mikel Arteta y el brasileño Jo, este en un impresionante debut en Goodison Park, firmaron un cómodo 3-0 para el Everton frente al Bolton Wanderers en una jornada desaprovechada por el Chelsea de Felipao, que ve alejarse cada vez más el título y al que contuvo en casa el Hull City (0-0). Ayer, frente a su afición, fue Arteta la columna vertebral de su equipo y el encargado de abrir el marcador.