Los clubes ingleses, ahogados por sus deudas y el desplome de la libra

Colpisa

DEPORTES

31 dic 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El dominio de la Premier League en el fútbol de clubes europeo se confirmó en el 2008, con la primera final protagonizada por equipos británicos en la historia de la Liga de Campeones, pero se ve amenazado hasta la asfixia por el desmesurado endeudamiento de sus clubes y el desplome de la libra esterlina, situación agravada por la negativa tendencia de la economía mundial.

El pasado 21 de mayo, en la final de la máxima competición continental celebrada en Moscú, el Manchester United ganó al Chelsea en la tanda de penaltis. Ahora, al igual que en las dos temporadas anteriores, Inglaterra acaba de meter a sus cuatro representantes en los octavos de final de la Champions, aunque deportivamente ningún integrante del big four (nombre con el que se conoce al grupo formado por el Arsenal, Manchester United, Liverpool y Chelsea) parece invencible como lo era el conjunto entrenado por Alex Ferguson hace un año.

Los red devils no han ganado más que dos partidos de la fase de grupos y les cuesta ver puerta; la invencibilidad del Chelsea en su estadio de Stamford Bridge ya es solo un lejano recuerdo; el Liverpool no marca en Europa como lo hace en el torneo local y el Arsenal tampoco parece bien pertrechado para llegar lejos.

Pero más que de los altibajos deportivos, la gran amenaza del fútbol inglés viene de la principal fuente de su fortaleza: el dinero. La crisis crediticia vuelve a sus clubes especialmente vulnerables. Según el presidente de la federación, David Triesman, los clubes afrontan un «peligro terrible», una deuda colosal de más de 3.000 millones de euros, concentrada en los clubes más grandes, que ni siquiera los derechos televisivos parecen poder rentabilizar ya.

El desplome de la libra, que ha perdido casi una cuarta parte de su valor respecto al euro desde hace un año, podría mermar considerablemente el atractivo del fútbol inglés para las estrellas internacionales.

El mercado de invierno podría ofrecer los primeros síntomas con la escasez de fichajes. También podrían verse mermado los desplazamientos masivos de hinchas ingleses en competiciones europeas. Si Gran Bretaña sigue hundiéndose en la crisis, la campaña 2009-2010 podría ser la de una nueva era: la del repliegue. Esta es la delicada situación económica de alguno de los principales clubes de la Premier League.

Liverpool

Los reds tendrán que renegociar a comienzos del año 2009, en el peor momento, su deuda con RBS y Wachovia, dos víctimas de la crisis. Su proyecto de construcción de un nuevo estadio ya se ha aplazado sin fecha concreta.

Arsenal

Los gunners pensaban financiar en parte su deuda de 320 millones de euros, nacida de la construcción del Emirates Stadium, con un proyecto inmobiliario en su antiguo recinto de Highbury. Pero el mercado londinense está de capa caída y los ingresos esperados podrían no llegar nunca.

Manchester y Chelsea

El Manchester United también está a merced de los bancos, mientras que el futuro del Chelsea depende de su mecenas, el millonario ruso Roman Abramóvich. Su dirección ha anunciado ya que se ha terminado la época de gastos suntuosos para fichar grandes estrellas.

Anteayer trascendieron las medidas económicas de contención que aplicará el magnate ruso para salvar su situación financiera personal. Tendrá que vender el club o su yate para hacer frente a sus deudas y, en el caso de continuar con la propiedad del Chelsea, prohibirá todo tipo de regalos fastuosos y gastos superfluos para sus empleados y futbolistas.