Carlos Sastre, recibido en El Barraco en olor de multitud

Agencias

DEPORTES

31 jul 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El flamante vencedor del Tour de Francia, Carlos Sastre, regresó ayer a España en medio del calor de sus seguidores tanto en el aeropuerto de Madrid como en el municipio abulense donde nació, El Barraco.

Unas dos mil personas se agolparon para arropar al ciclista en su pueblo, donde no solo le esperaban amigos, vecinos y aficionados del ciclismo sino también su peso en rosquillas (51 kilos) y más de una treintena de medios acreditados.

Sastre había aterrizado en Barajas afirmando sentirse «feliz y contento» por estar ya en casa y reconoció que había experimentado ansiedad por llegar a El Barraco. Con la camiseta amarilla en la mano, Sastre reiteró lo feliz que sentía por haber hecho realidad el sueño de su vida, y también expresó que necesitaba descansar un poco. «Y, cuando esté más tranquilo analizaré lo que ha pasado», añadió.

«Lo intenté, luche por ello y lo he conseguido», afirmó sonriente, tras indicar que ahora deberá centrarse en los Juegos Olímpicos que se celebrarán en Pekín y más tarde, en la Vuelta Ciclista a España.

Carlos Sastre expresó las ganas que tenía de llegar a su pueblo, «para compartir todas las emociones con ellos». «Porque son los que me han visto crecer y progresar», afirmó.

El vencedor del Tour de Francia se declaró también satisfecho porque le comparasen con Perico Delgado, porque, según él, ha sido su «ídolo de toda la vida». Asimismo destacó «lo bonito que es que suene el himno español en Francia», donde los españoles han ganado las últimas tres ediciones.

El Barraco, una localidad de unos dos mil habitantes, se engalanó con pancartas, jerséis amarillos, cánticos y banderines dedicados al campeón. Por eso, Sastre dedicó a sus vecinos el maillot amarillo por su apoyo, a la vez que confirmó que acudirá a la Vuelta a España «para hacerlo bien».

También se mostró optimista con respecto al papel de la joven selección española en la cita olímpica de China de este mes. «Todos vamos con los deberes al día», ha argumentado, en referencia a los triunfos logrados por todos ellos durante la presente temporada, si bien ha hecho hincapié en la «importancia de una estrategia bien hecha para el día de la carrera».

Visiblemente emocionado y con su hijo pequeño en brazos, ha agradecido los gestos de cariño de su pueblo -que le dedicará una calle-, de Ávila -que pondrá su nombre a un pabellón- y de la Diputación abulense, cuyo presidente ha anunciado que propondrá en el pleno de septiembre que se le conceda de la Medalla de Oro de la Provincia.