Pereiro pasará hoy por el quirófano, donde le unirán el húmero con una placa

M. F.

DEPORTES

23 jul 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Óscar Pereiro será operado hoy en la Clínica Fátima, en Vigo. Aunque el ciclista esperaba pasar por el quirófano ayer, en el centro médico decidieron someter al corredor a nuevas pruebas analíticas antes de la intervención, que comenzará a las once de la mañana y durará entre una hora y hora y media. Pereiro se fracturó el húmero del brazo izquierdo en una etapa alpina del Tour de Francia, cuando descendía el alto del Agnel y cayó desde una altura de cinco metros. El corredor ayer se encontraba mucho mejor. Pudo dormir la noche anterior, ya que su dolor era menos intenso que el que padeció en Italia.

El doctor José Manuel Martínez-Sayanes, jefe de traumatología de la Clínica Fátima, será el encargado de realizar la operación. «El diagnóstico es fractura transversa de la diáfisis del húmero», explicó. Se trata, por tanto, de una rotura en la zona media del hueso que no ha afectado ni a nervios ni a vasos sanguíneos, una lesión menos grave de lo que había anunciado en un principio el Caisse d'Epargne.

Osteosíntesis

«Hay que hacer una reducción abierta y una osteosíntesis, que es la unión del hueso mediante una placa y tornillos para que el paciente se pueda recuperar cuanto antes», señaló Martínez-Sayanes. «Como es una fractura transversa, lo normal es que utilicemos seis tornillos de cada lado, aunque esto dependerá de la situación con la que nos encontraremos durante la intervención», apuntó. El doctor estima que la intervención durará entre una hora y hora y media.

Después a Pereiro se le realizará movilización precoz. «Los primeros días ya podrá mover el miembro afectado, tanto el hombro como el codo», señaló Matínez-Sayanes.

En principio, la operación solo presenta las posibles complicaciones que pueden plantearse en cualquier tipo de cirugía.

Tiempo de recuperación

«La recuperación en un adulto de la edad de Óscar Pereiro oscila entre las seis y las ocho semanas, que es el período de tiempo que puede tardar en consolidar el hueso», añadió el traumatólogo.

En principio no es necesario que el corredor se someta a una nueva intervención para que le sea extraída la placa. La cirugía solo sería necesaria en el caso de que Pereiro sintiera molestias en un futuro. «Es una situación que se puede plantear en deportistas de riesgo, pero no tiene por qué suceder», matizó Martínez-Sayanes.

Después de la decepción que sufrió inicialmente por el hecho de que la cirugía se retrasara un día, el ciclista «se mostró muy animado y con ganas de recuperarse», en palabras del galeno.