Trece gallegos forman parte de la selección española que estará en el campeonato continental que se celebra en aguas pontevedresas
24 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.El piragüismo gallego se examina esta semana en casa. Afrontará su primer gran compromiso internacional como local, el Campeonato de Europa. Pero se encontrará ante un dilema. El de estar en cierta medida obligado a firmar un buen papel y, al mismo tiempo, reservar fuerzas para el Mundial, la cita definitiva, la puerta de los Juegos de Pekín. El reto se reduce a la dificultad de nadar y guardar la ropa. O, más bien, remar y guardar combustible. Galicia volverá a ser el motor de la selección española. Aporta trece palistas al equipo nacional, más de un tercio del grupo, que está formado por 34 integrantes. Y presenta más del doble de piragüistas que la segunda comunidad con mayor número de representantes, Asturias, que cuenta con seis. La convocatoria concreta en números la superioridad de los palistas gallegos. Nueve de ellos pertenecen a la selección A, la formada por ilustres a los que se les exige resultados. Los otros cuatro buscarán rodaje en el equipo B con menos expectativas y también más liberados de presiones. David Cal En cualquier cita en la cumbre, David Cal es uno de los competidores a vigilar. El cangués participará las pruebas de C-1 en 1.000 y 500 metros como un paso más hacia su gran objetivo, revalidar en los Juegos Pekín los éxitos olímpicos de Atenas. Cal vuelve a ser el gran referente de la expedición española. Otro de los nombres destacados será, como en los últimos años, Teresa Portela. En los anteriores Europeos, que se celebraron en Recice, en la República Checa, fue la única española se colgó un oro, el que conquistó en el K-1 200, una prueba que domina a la perfección. En esta ocasión su gran cita será el K-4 500 con vistas olímpicas junto a otra gallega, Sonia Molanes, y a las asturianas Jana Smidakova e Isabel García. Si Portela logró el único título continental en el 2006, Carlos Pérez Rial consiguió en el Campeonato del 2005 la única medalla que se trajo el equipo nacional de Poznan. Perucho, como Portela y Cal, es producto de la factoría de Aldán. Competirá en el K-1 500. El incombustible Alfredo Bea y David Mascato participarán en las pruebas de C-2 500 y 1.000 metros. Bea busca esta temporada su enésima presencia olímpica. Este Europeo supondrá el regreso a la élite continental de otro clásico del piragüismo gallego, Jovino González, que llega después de haber cumplido dos años de sanción por dopaje y formará parte del K-2 que competirá en los 500 metros. En el K-4 masculino, el 50% de sus componentes es de Galicia. Jaime Acuña y Borja Prieto remarán junto a Manuel Muñoz y Saúl Craviotto en los 1.000 metros. El objetivo de los canoístas José Luis Bouza, Miguel Rodríguez Galbán y Andrés Oliveira, y de la kayakista Silvia Vázquez, todos ellos en la selección B, será ganar experiencia en regatas en las que España no cuenta con otros palistas con opciones. Después, quizás sigan los pasos de los ilustres, de los que aceleran el motor del equipo nacional.