Los penaltis sitúan al Racing a sólo un paso de la Segunda

José Valencia ENVIADO ESPECIAL | LINARES

DEPORTES

JOSÉ PARDO

El equipo gallego aguantó en la prórroga con un jugador menos

10 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

El Racing consiguió ayer una agónica clasificación para la eliminatoria decisiva para el ascenso a Segunda A. El equipo ferrolano, que había ganado por 2-0 en A Malata, perdió en Linares por idéntico resultado, pero logró el pase gracias a su numantina resistencia en la prórroga -con un jugador menos- y tuvo más puntería en la tanda de penaltis. El equipo ferrolano sufrió durante casi todo el partido. Se habría ahorrado algo de esfuerzo, casi con toda probabilidad, si Manolo llega a aprovechar la mejor ocasión del Racing, a los diez minutos. Después, el equipo que entrena Juan Veiga aguantó con bastante orden hasta el descanso. Los problemas llegaron en el segundo tiempo. Primero con un gol de Dani Bouzas y después con otro del larguirucho Postigo. Para colmo, el letón Andrejs Prohorenkovs -quien no marcó todavía con el Racing en más de mil minutos sobre el campo- se marchó expulsado justo antes de la prórroga. El Racing afrontó el tiempo extra con un jugador menos. Pero defendió como pudo ante un rival al que también empezaron a fallarle las fuerzas. Para el equipo verde la tanda de penaltis era la mejor salida. Y cuando terminó la prórroga, se abrió de nuevo una puerta a la esperanza de una posible clasificación. Desde los once metros, el Racing sólo falló un lazamiento, que el ex oviedista Idrissa Keita estampó en el larguero, mientras que el Linares falló los lanzamientos de sus dos centrales, Chico y Cidoncha. Ahora, ante el Alicante La plantilla regresó en autobús nada más terminar el partido. El Racing tenía previsto entrenar esta misma mañana en el campo anexo de A Malata. Mañana disfrutará de jornada de descanso y el miércoles comenzará a preparar la ronda decisiva por el ascenso, que le enfrentará al Alicante. El primer partido se disputará este próximo fin de semana en el José Rico Pérez. El Racing sufrió ayer su vigésimo cuarta expulsión de la temporada, un dato que dice muy poco de su autocontrol. El equipo ferrolano lleva toda la campaña acostumbrándose a disputar partidos en inferioridad, en alguna ocasión con sólo nueve hombres sobre el campo. En esta eliminatoria ante el Linares, sufrió la expulsión del francés Cohen en la ida y de Prohorenkovs en la vuelta.