A «Súper Pepe» le desvalijaron la casa mientras paraba los penaltis

La Voz A. A. | REDACCIÓN

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PHIL NOBLE

Reportaje | La agitada noche de Reina | Al guardameta del Liverpool, héroe en la clasificación de su equipo para la final de la Liga de Campeones, le sustrajeron las joyas y el coche de lujo, calcinado en otra zona de la ciudad

02 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Para y cruz para Súper Pepe, como bautizó ayer el Daily Express al guardameta español del Liverpool José Manuel Reina Páez, verdugo del Chelsea en las semifinales de la Champions. Once y media de la noche del martes. Pepe Reina se convertía en el héroe de Anfield al detener dos lanzamientos en la tanda de penaltis, a Robben y Geremi. Con su equipo en la final, era paseado a hombros por sus compañeros, mientras la afición coreaba su nombre entre lágrimas de alegría. No era el único hombre feliz en Liverpool. Tan sólo a unos kilómetros del estadio, los ladrones veían el desenlace del partido instalados cómodamente en su vivienda, de la que se llevaron, entre otros objetos, joyas, un sistema audiovisual de última generación y el vehículo de lujo del futbolista, un Porsche Cayenne que calcinaron horas más tarde en otra zona de la ciudad. El propio Reina explicó el «bajón» que tuvo al regresar a casa de madrugada: «Vienes de uno de los momentos más felices de tu vida y en el párking de tu casa no está el coche. Luego entras y está todo patas arriba, y eso asusta. No pudo ser la felicidad completa», lamentó. El español no es el primer jugador del Liverpool que ha sido víctima de un robo mientras disputaba un partido. A Jerzy Dudek le pasó en junio del 2006. También perdió un Porsche y varias joyas, pero además se quedó sin su medalla de campeón de la Champions en el 2005. Y al defensa danés Daniel Agger le desvalijaron la casa en septiembre. Pero el mal trago de Reina no bastó para borrar la alegría de su rostro después de una de las actuaciones más importantes de su carrera, que lo confirma además como un extraordinario para-penaltis, una cualidad que ya había exhibido en España. Como portero del Villarreal detuvo siete de nueve lanzamientos en la temporada 2004-05, gracias a lo cual su equipo se metió en semifinales de la Copa de la UEFA. «Reina consigue que el arte de parar penaltis parezca sencillo», destacó ayer The Independent. A lo que el guardameta respondió: «Para detenerlos debes tener un poco de información y saber por dónde se encuentran ellos cómodos al tirarlos. Después influyen muchas cosas, como la presión, los nervios. A veces los rivales deciden cambiar, pero bueno, afortunadamente salió todo bien y mis compañeros me facilitaron por el éxito». Reina admitió que había trabajado con el preparador de porteros para una hipotética tanda de penaltis frente al Chelsea.