Calderón culpa a Florentino de sabotear el fichaje de Kaká

Ignacio Tylko MADRID

DEPORTES

El presidente del Madrid dijo en un coloquio universitario que sus jugadores son vanidosos y «nunca pagan donde van»

16 ene 2007 . Actualizado a las 06:00 h.

Florentino Pérez saboteó el fichaje de Kaká por el Real Madrid el pasado verano, Arrigo Sacchi se marchó del club porque no le dejaban ni opinar, Guti es una eterna promesa, a Beckham no le quería nadie, los jugadores son vanidosos y sin formación, y la afición blanca acude al Santiago Bernabéu como si fuera al teatro o a la ópera. Éstas fueron sólo algunas de las lindezas que soltó por su boca Ramón Calderón el pasado martes durante una incendiario coloquio celebrado ante alumnos de quinto de Derecho en el Centro Universitario Villanueva de Madrid, según reveló la Cope. El máximo mandatario blanco atendió a las cuestiones de los estudiantes convencido de que se trataba de un acto privado y nadie le grababa, y se metió en todos los charcos posibles. Intentó justificar su incumplida promesa electoral de fichar a Kaká por culpas ajenas. «Pérez habló con Silvio Berlusconi para que renovara a Kaká y el presidente del Milan se apresuró a mantenerle», proclamó Calderón. También responsabilizó a Florentino Pérez del error de forzar la marcha de Sacchi, ex director de fútbol del club blanco. «Arrigo sabía como ninguno de fútbol, pero no le dejaron hablar ni opinar. Florentino se creía que sabía más que nadie», espetó. También arremetió contra Beckham. Dijo que el inglés «se va a Hollywood para ser un medio actor de cine». Subrayó que su no renovación es un acierto de Capello y Mijatovic. «Ninguna secretaría técnica del mundo lo quiso, sólo en Los Angeles», reveló. Otro foco de las críticas fue Guti. «Es una eterna promesa que nunca ha contado de verdad. Empezó con Raúl y, mientras éste lleva 12 años como figura, Guti sigue siendo una promesa a los 31 años», proclamó. Hace poco más de un mes renovó hasta el 2010 el contrato del jugador. El presidente generalizó sus reproches hacia el vestuario. «Hay vanidad, ego, todos tienen la sensación de que son superfiguras... Un jugador del Madrid nunca paga donde va. Vosotros (los estudiantes) tenéis cultura y formación; ellos, generalmente no la tienen», arguyó. Además, comparó los sueldos de los porteros. «Casillas cobra nueve millones de euros al año y Diego López gana 300.000», descubrió ante un auditorio atónito. También censuró Calderón la frialdad de la afición madridista: «Al contrario de lo que ocurre en Italia o en Inglaterra, donde la gente no para de animar, aquí van al Bernabéu como si asistieran al teatro o a ver a Plácido Domingo».