Cinco medallas, una de ellas de oro, objetivo para el Mundial
04 ago 2005 . Actualizado a las 07:00 h.Tres lustros después España acude a un mundial de atletismo con la esperanza de colgarse un oro. No sucede desde 1999 en Sevilla cuando Niurka Montalvo y Abel Antón ganaron la longitud y el maratón. Y ese primer puesto puede llegar por la vía rápida, porque Paquillo Fernández, la baza más segura de la delegación hispana, afrontará los 20 kilómetros marcha en la jornada inaugural del sábado. El accitano debe servir de locomotora para cubrir el objetivo de las cinco medallas, el mejor resultado en todas las citas mundialistas. La delegación española, formada por 51 atletas (33 hombres y 18 mujeres) partió en la jornada de ayer rumbo a Helsinki, la misma ciudad que vio nacer los mundiales de la disciplina en 1983 y en donde el hoy seleccionador nacional de marcha, Josep Marín consiguió la primera medalla, de plata. Un cuarto de siglo después la marcha sigue siendo el valor más seguro del atletismo español, por eso Paquillo -que lo ha ganado todo este año con Robert Korzeniowski como entrenador- apunta al oro. Él mismo aceptó el reto de favorito antes de partir: «Llevo tres años ganando medallas, soy subcampeón mundial y olímpico y este año no he perdido ninguna carrera, mentiría si dijera que no soy favorito». Los 1.500, prueba talismán La segunda esperanza volverá a ser el 1.500, la prueba talismán del atletismo español que en Helsinki que presenta más abierta que nunca ante la ausencia de Hicham El Gerrouj. En teoría Reyes Estévez y Juan Carlos Higuero son los grandes candidatos al podio, pero Arturo Casado, el flamante campeón de España a sus 22 años, parece el tapado perfecto. Dice que va a disfrutar, pero nadie duda que pueda regresar con una medalla colgada del cuello después de su espectacular mes de julio. Joan Lino Martínez es otra de las grandes esperanzas. Este cubano ha hecho pleno cada vez que se ha enfundado la elástica española. Huelva, Atenas y Madrid, las tres citas internacionales del último año, se han rendido a su salto. Acude a Finlandia con un mejor registro de 8,17 en el 2005. Y aunque Odriozola, el presidente pitoniso, en esta ocasión no ha querido dar nombres, a nadie se le escapa que en su quiniela también entra de lleno el maratón. Julio Rey falló en el trayecto olímpico del pasado agosto, pero el toledano ha preparado su asalto mundialista para repetir la gesta de hace dos años en París. Su tercera victoria en el maratón de Hamburgo en la primavera le coloca en el disparadero hacia el podio. En la vertiente femenina Concha Montaner presenta los mejores números dentro del equipo español. Su reciente salto de 6,92 en Madrid le permite llegar al mundial con la tercera mejor marca y con serias opciones de lograr su primer gran éxito internacional. Pero en este cupo femenino nadie puede olvidar el momento brillante del salto de altura con Ruth Beitia y Marta Mendía, el carácter ganador de Mayte Martínez en el 800 y el regreso de la reina Marta Domínguez, dispuesta a romper todos los pronósticos en el 5.000. Otro ilustre de la distancia, Alberto García, vuelve al concierto internacional tras su suspensión por dopaje durante dos años. ¿Será de nuevo el africano de Vallecas?