El Dépor recupera el gol y liquida a un flojo Slaven

La Voz LA VOZ | REDACCIÓN

DEPORTES

Tristán jugó sus primeros minutos y logró el tercer tanto

23 jul 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

El Dépor reencontró en Croacia su aletargado instinto goleador, una forma física decente aunque todavía en gestación y los primeros síntomas de recuperación de Diego Tristán en dos años (largos). Todo ello le sirvió para liquidar a un flojo Slaven Belupo y alcanzar las semifinales de la Intertoto. El miércoles visitará Riazor el Newcastle inglés, y eso ya será otra historia. Después de numerosas pruebas en punta, parece que Caparrós ha encontrado una aportación interesante en el canario Rubén. El Deportivo adoleció de remate en partidos anteriores, pero no en Koprivnica. Rubén abrió la lata. No es un delantero corpulento que se imponga por envergadura. Tampoco es un futbolista rápido en carrera, pero tiene virtudes que encajan bien con lo que quiere Caparrós. Presiona arriba y remata todo lo que le llega porque es listo y ágil en el área. No se lo piensa y tiene olfato. Marcó dos goles (el segundo fue anulado) y colocó los cimientos de su permanencia en A Coruña. Sus limitaciones las suple también con una habilidad notable, como la que demostró al dejar sentado a Pavo Crnac, capitán del Slaven, con un túnel de varios kilómetros. El remate sin ángulo, preciso, encontró una vez más la colaboración de un portero balcánico, deportivistas declarados. Al margen de la aportación individual de Rubén, varios jugadores empiezan a despertar. Es el caso de Valerón, más activo que en partidos anteriores, quizá porque el tono físico comienza a ser el adecuado, aunque quede camino por delante. Esa mejoría física se notó sobre todo en el plano colectivo, en la superioridad y en la autoridad con que el Dépor manejó el partido en el primer tiempo, en el que el Slaven ni existió. Con una superioridad casi insultante, los coruñeses recuperaban el balón cuando querían para administrar después la posesión. La presión que exige Joaquín Caparrós es cada vez más intensa e hizo que el rival apenas inquietase la portería de Molina mientras duraron las fuerzas. Fue bueno asimismo el trabajo de todo el centro del campo en cobertura, con bastante trabajo para Munitis y Víctor. El minuto 2 de la segunda parte supuso el final de la eliminatoria cuando Héctor fue izado desde el suelo por un defensa en un penalti propio de un partido de juveniles que ni protestó la afición ni el equipo local, posiblemente asustado al constatar el verdadero nivel de su defensa. Víctor engañó al portero y llevó el balón a la red. Los minutos de la basura sirvieron para que Tristán jugase sus primeros minutos esta temporada. Con el duelo resuelto y el Deportivo algo más atrás, encontró espacios para debutar con un gol de picardía y esperanzador. ¿Su recuperación será cierta en esta ocasión?