
Los becados por la Fundación Montemadrid fueron elegidos por un jurado
05 jun 2025 . Actualizado a las 19:07 h.El Marco de Vigo expone la obra de lo más selecto de la más reciente generación de artistas españoles. Son ocho creadores emergentes elegidos por un jurado internacional en la última convocatoria del proyecto Generaciones que impulsa la Fundación Montemadrid. Todos obtuvieron una beca para desarrollar sus proyectos con el fin de exponer el conjunto en La Casa Encendida. Tras su paso por el centro cultural madrileño, la exposición, denominada Generación 2025, se podrá ver en el Marco de Vigo hasta el 12 de octubre. Generaciones, que alcanza su vigésimo quinta edición, es un gran referente nacional para medir el pulso de la creación artística más reciente.
Los artistas elegidos en esta ocasión son Marina González Guerreiro (A Guarda, 1992), Álvaro Chior (A Coruña, 1992), Noela Covelo Velasco (Pontevedra, 1994), Tana Garrido Ruiz (Tarragona, 1989), Marina Mar Reykjavik (Valencia, 1995), Isabel Merchante (Madrid, 1999), Elián Stolarsky (Montevideo, 1990) y Javier Velázquez Cabrero (Madrid, 1990). Todos comparten narrativas sobre futuros deseables y la IA como productora de ficción, así como su interés por la oralidad, la voz, el canto y el estudio de la historia del tiempo.
Pablo Berástegui, director de La Casa Encendida, explicó durante la presentación del proyecto expositivo que, en la próxima edición del proyecto Generaciones, la Fundación Montemadrid reducirá el número de becas para incrementar la cuantía de las mismas y que los artistas seleccionados tengan una mayor capacidad para materializar sus proyectos artísticos.

La primera planta del Marco acoge un vídeo monocanal en loop, realizado por Álvaro Chior, para reflexionar sobre la relación entre el canto y un canto rodado. La pontevedresa Noela Covelo incide en el medio sonoro como material y espacio. Por su parte, la guardesa Marina González propone una instalación muy escultórica para vincular el tiempo y el cambio.
Agitar lo que se percibía inmóvil es el título de la videoinstalación que aporta Tana Garrido para cuestionar la imagen como mediadora de lo real. Isabel Merchante también trabaja con la instalación audiovisual. La valenciana Mar Reykjavik apostó por el vídeo bicanal para realizar un ensayo sobre la traducción y la censura.
La propuesta más orgánica está firmada por Elián Stolarsky. A través de una instalación textil, trata de recuperar la memoria de su familia, huida del nazismo. Completa la exposición una videoinstalación de Javier Velázquez Cabrero con la que reconsidera la forma de estar en el mundo en un momento de fragilidad ecológica. «Planteamos un proyecto muy distinto al que se pudo ver en Madrid», explicó Miguel Fernández-Cid, director del Marco. La diferencia viene marcada por los grandes espacios expositivos que ofrece el museo vigués.
Como es habitual en el Marco, esta exposición se complementa con talleres dirigidos a público infantil y visitas guiadas para colectivos.