Premios Óscar 2023: ¿Por qué «Todo a la vez en todas partes» ha sido la gran triunfadora de la noche?

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Michelle Yeoh, en una escena de «Todo a la vez en todas partes»
Michelle Yeoh, en una escena de «Todo a la vez en todas partes» Allyson Riggs | EFE

El segundo largometraje de los Daniels, el dúo formado por Daniel Kwan y Daniel Scheinert, ha conseguido alzarse, para sorpresa de todos, con la mayoría de los grandes premios de esta edición, por encima de gigantes como Steven Spielberg y James Cameron. ¿Cuál ha sido su secreto? La originalidad de la propuesta, su carismático elenco y conmovedora historia son algunas de sus claves

13 mar 2023 . Actualizado a las 10:32 h.

Curiosamente, en un año en el que coinciden en las carteleras dos de los directores más celebrados de Hollywood, Steven Spielberg y James Cameron, la película más galardonada en los Premios Óscar 2023 ha sido una de los que son casi unos recién llegados, los Daniels, quienes han conseguido colar su segundo largometraje en la lucha por el mayor número de estatuillas de esta edición. Todo a la vez en todas partes (Everything Everywhere All at Once), la gran sorpresa cinematográfica del año, se ha alzado con 7 estatuillas, en prácticamente todas las categorías principales en las que estaba nominada. Mejor película, director —directores, en este caso—, interpretaciones —prácticamente todos sus actores—, guion original y mejor montaje. La película favorita en todas las casas de apuestas para alzarse como la gran victoriosa de la noche (que puede verse con la suscripción de Movistar Plus+ o en alquiler en Amazon Prime Video, YouTube, Google Play Películas o Apple TV) ya viene precedida por un buen número de galardones. Pero, ¿a qué se debe su éxito? ¿cuáles son los secretos de esta comedia dramática que no deja indiferente a nadie? Desgranamos sus claves.

Drama multiversal en la era TikTok

El multiverso está de moda. Sin lugar a dudas. En los últimos años, varias propuestas han tratado el tema de los mundos paralelos, del viaje entre las diferentes posibilidades que se abren en nuestras vidas según las decisiones que tomemos. La película de animación Spiderman: Un nuevo universo —indiscutible ganadora del óscar en el 2019— ya había tocado el tema con soltura, humor y acción, y la senda la continuó la franquicia más popular de nuestro tiempo, el Universo Cinematográfico de Marvel, en la nueva saga que todavía sigue su curso.

La propuesta de Todo a la vez en todas partes es, al mismo tiempo, mucho más grande y mucho más íntima que la de sus versiones superheroicas, pero entra de lleno en esta tendencia propia de la era TikTok, con películas que exploran la sobreabundancia de estímulos, el desaforado ritmo y el consumo instantáneo de la sociedad actual a través de la mezcolanza de distintos estilos de cine y animación.

Una propuesta 100% Daniels

Todo a la vez en todas partes es sinónimo de sus directores, los Daniels. Una película totalmente personal que solo se les podría haber ocurrido a las mentes locas de Daniel Kwan y Daniel Scheinert. El dúo ya había filmado en el 2016 otra película, titulada Swiss Army Man, que destacaba por su surrealismo y su humor negro. Esos dos ingredientes están elevados a la enésima potencia en Todo a la vez en todas partes. Y, a pesar de ello, su propuesta es mucho más sofisticada. La locura sigue estando ahí, pero, incluso en sus momentos más desconcertantes, todo ayuda a contar la historia de sus protagonistas.

Mix de estilos cinematográficos

Los Daniels juegan con el montaje, con los diferentes estilos cinematográficos, distintas texturas y colores y muy diversos ritmos para explorar el multiverso en todas sus vertientes. En ese camino de la protagonista por poner en orden su vida aparece la propia carrera de la actriz protagonista —Michelle Yeoh— y su éxito internacional Tigre y dragón; las referencias constantes al cine hongkonés de acción y artes marciales; el particular acercamiento al romanticismo del Wong Kar-wai de Deseando Amar o el zen más contemplativo protagonizado por dos inertes rocas. Una plétora de estilos cinematográficos, en apenas 2 horas y cuarto, que sirven para contraponer todas las vidas posibles de Evelyn Wang, la protagonista del filme.

Abundancia de géneros

El género de Todo a la vez en todas partes, como ya indica su propio título, es inclasificable. Es todos los géneros a la vez en una película. La cinta comienza con una comedia dramática costumbrista, de una inmigrante china que debe buscar la forma de salir adelante ante una situación económica complicada, pero las cosas enseguida se salen de madre. 

Es un filme de comedia, pero también es un drama, y abarca desde la ciencia ficción de los viajes en el tiempo y entre dimensiones hasta el cine de aventuras, las artes marciales o incluso las películas románticas.

Drama familiar

Multitud de estilos, variedad de géneros, pero lo que subyace en la historia de Evelyn Wong es, en realidad, un gran drama familiar. La protagonista es una persona de carácter que, debido a su férrea educación y disciplina, encuentra difícil sintonizar tanto con su esposo, un entrañable Ke Huy Quan, como con su hija, una explosiva Stephanie Hsu. En Todo a la vez en todas partes hay drama de pareja, y también drama intergeneracional

El pragmatismo de Evelyn choca con lo que ella cree que es el conformismo de su esposo y el nihilismo destructivo de su hija. Una resignación que no es tal, y que es en realidad empatía, y un aparente escepticismo vital que esconde, en última instancia, la frustración de la falta de comprensión y comunicación con su madre. Todo a la vez en todas partes es el proceso de su protagonista para entender que, al contrario de lo que ella cree, la solución no está en que sus seres queridos cambien para mejorar su vida, sino en adaptar el sentido de su propia vida a las peculiaridades de su círculo íntimo.

La grandeza de lo cotidiano

Esa vorágine argumental en la que nos sumerge la película de los Daniels podría parecer, sobre el papel, apabullante. Pero, en el fondo, el corazón de esta explosiva película es pequeño y cálido, y se encuentra en una reivindicación de lo cotidiano. Todo el despliegue visual preparado por sus directores no es más que un envoltorio que utilizan para dirigir unos dardos que impactan directamente en nuestras glándulas lacrimales.

Las dos grandes frases de la película, aparentemente inocuas pero cargadas de un gran sentido, las dice el esposo de Evelyn.

La protagonista descubre el misterio mejor guardado de su aparentemente despistado marido en una de la escenas más emotivas del filme. El secreto que la puede llevar a la victoria: «Por favor, sé amable», le dice él entre lágrimas. La empatía, el corazón, como arma contra todos los problemas que la afligen.

En una de esas escenas en las que Evelyn comprende los sentimientos de su esposo, los Daniels homenajean al particular estilo de Wong Kar Wai, el director hongkonés que también tiene una particular concepción del tiempo y que sabe sacar la mayor belleza de los detalles más pequeños y de los gestos más sutiles. Su esposo en ese universo —mucho más seductor— sentencia sus propios sentimientos en una frase tan superficial como profunda: «En otra vida, me habría encantado, simplemente, hacer la colada y la declaración de la renta contigo».

En medio de la grandeza de las posibilidades multiversales y de las expectativas de futuro, los autores insisten en la importancia de la vulgaridad de la vida cotidiana y de nuestro entorno cercano como una de las grandes recetas para salir adelante.

Todo a la vez en todas partes es, también, la única película en el que dos inertes rocas que contemplan un paisaje desértico pueden hacernos soltar una gran carcajada, y también llenar todos nuestros pañuelos de lágrimas, en plena catarsis de Evelyn en su relación con su hija.

Carismático elenco de actores

Entre la multitud y diversidad de ingredientes que manejan los Daniels en Todo a la vez en todas partes, si hay algo que destaca especialmente es su elenco actoral. No en vano, la mayoría de los premios que ha logrado la película han sido para sus intérpretes.

Entre sus actores y actrices, mayoritariamente asiáticos, la mayoría de ellos destacan por su condición de estrellas de culto

La absoluta protagonista de la cinta, Michelle Yeoh, es toda una veterana del cine. Con una carrera cinematográfica que comenzó allá por el año 1984, solo un año después de haber sido elegida Miss Malasia en su país natal, destacó en un principio por su participación en películas hongkonesas mano a mano con Jackie Chan y Chow Yun-Fat. Su vinculación con las películas de marciales le viene de lejos y, a pesar de no haber recibido formación al respecto, es de las pocas actrices que hace sus acrobacias sin usar dobles de acción. Su reconocimiento internacional le vendría en el año 1997 cuando participó, junto a Pierce Brosnan, en la película de 007 El mañana nunca muere. Pero, sin duda, su papel más recordado fue el de la noble heroína de Tigre y Dragón, de Ang Lee. Sin embargo, no sería hasta ahora, ya con 60 años, cuando se llevaría por su primera estatuilla, demostrando que la edad no importa. Es, además, la primera asiática en conseguirlo en 90 años.

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Michelle Yeoh gana el #GoldenGlobe como Mejor Actriz de Película Comedia por "Todo En Todas Partes Al Mismo Tiempo". #Latinus #InformaciónParaTi

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La edad, como demuestra Yeoh, no importa. Y, si no, que se lo digan a James Hong, que a sus 93 años interpreta al padre de la protagonista en la película. La carrera de este hijo de inmigrantes hongkoneses empezó en los años 50, en un Hollywood en el que actores como Marlon Brando, John Wayne o Mickey Rooney interpretaban a personajes asiáticos ayudándose del maquillaje, mientras él era relegado a doblar personajes japoneses o chinos. «En aquellos momentos el papel principal lo hacían hombres blancos con los ojos estirados con cinta adhesiva, porque decían que los asiáticos no éramos suficientemente buenos… ¡Míranos ahora!», dijo cuando recogió el premio del Sindicato de Actores al Mejor Elenco.

Todo a la vez en todas partes ha dado oportunidades a intérpretes normalmente relegados a un rol secundario en Hollywood. Y nadie sabe más de eso que el siempre querido Ke Huy Quan. El nombre, como es de esperar, no les dirá nada a muchos. Pero, en realidad, todo el mundo lo conoce: se trata del actor que interpretó a Tapón en Indiana Jones y el templo maldito, y a Data en Los Goonies. Ke Huy Quan intentó seguir en la interpretación, pero la falta de oportunidades le llevó a abandonar la actuación. Hasta Todo a la vez en todas partes, que ha vuelto a encumbrarlo gracias al papel del paciente marido de la protagonista, con el que ha ganado, entre otros, el Globo de Oro y se ha convertido en el primer asiático en alzarse con el Premio del Sindicato de Actores como Mejor Actor de Reparto. Ahora, se ha llevado también el óscar a Mejor Actor y, en el escenario, se ha reencontrado, entre lágrimas, con el actor en el que participó en su primera película: Harrison Ford, que entregó el premio a la Mejor Película.

También destaca en el elenco Stephanie Hsu, que interpreta a la inconformista hija —y némesis multiversal— de Evelyn. La intérprete, conocida por participar en La maravillosa sra. Maisel, es una de las grandes promesas actorales del momento. Y si no ha ganado el óscar a Mejor Actriz de Reparto no ha sido por falta de talento, sino más bien porque coincidía en las nominaciones con otra grande.

La que se ha llevado el óscar a Mejor Actriz de Reparto ha sido otra artista de culto, Jamie Lee Curtis, en la que era la primera nominación de la Academia de Hollywood en su dilatada carrera. Por un papel, además, en el que está completamente irreconocible. Jamie, hija de las estrellas de Hollywood Tony Curtis y Janet Leigh, no ha dudado en definirse, en la aceptación de su uno de sus premios, como una nepo baby, el término utilizado en Estados Unidos para definir a las personas que triunfan gracias a la carrera de sus padres. Pero su carisma es indudable. Desde su debut como una de las grandes scream queens en la película Halloween, de John Carpenter, la estadounidense no ha parado de trabajar en todo tipo de géneros, desde la comedia a la acción.

Una productora llena de joyas

Además de sus directores, no se puede negar la importancia de la empresa que ha hecho todo esto posible: la productora independiente A24, que acaba de hacer historia al ser la primera vez que una misma compañía se lleva los premios de todas las categorías principales. Además de las 7 estatuillas a Todo a la vez en todas partes, la otra que faltaba, la de Mejor Actor, se la ha llevado Brendan Fraser por otra película producida por ellos: La ballena (The Whale).

Todo a la vez en todas partes ha sido, de lejos, el mayor éxito creativo y comercial de la productora independiente A24, pero no es ni mucho menos su única joya. El catálogo de esta compañía estadounidense creada en el año 2012 por tres socios es, aunque breve, de altísima calidad y marcada personalidad.

El crecimiento de la empresa fue posible gracias al éxito del filme Spring Breakers en el año 2013, y solamente dos años después, soltaba tres grandes hits de culto: Ex Machina, la interesantísima película de ciencia-ficción de Alex Garland; la claustrofóbica La habitación (The Room), que le valió a la actriz Brie Larson un óscar a la Mejor Actriz Protagonista, y La Bruja (The Witch), que marcaría el debut del aclamado director Robert Eggers, conocido también por su experimental El faro (The Lighthouse). Solo un año después, otra de las películas de la productora, Moonlight, ganaría, no sin polémica por la recordada equivocación de los presentadores, el óscar a Mejor Película.

Entre sus mayores éxitos están también las personales películas del realizador Ari Aster, que marcó una nueva forma de hacer terror en obras como Hereditary o Midsommar, que era hasta este año la película más taquillera de la productora.

A24, que también produce películas de grandes del cine como Sofia Coppola, Claire Denis, Gaspar Noé o Darren Aronofsky, se ha convertido en todo un referente para el cine independiente actual. Y Todo a la vez en todas partes es una prueba más de ello.

Una película de óscar

Con once nominaciones, y la ristra de premios que lleva acumulados en antesalas de los Óscar, como son los Globos de Oro o los Premios del Sindicato de Actores, Todo a la vez en todas partes tenía prácticamente asegurado el éxito en los Premios Óscar 2023. Pero, aún así, su éxito rotundo ha sido casi una sorpresa. La película de los Daniels era ya una de las favoritas en las quinielas y, sin duda, toda una muestra de virtuosismo cinematográfico, pero debido a su arriesgada propuesta narrativa, era impensable para muchos que miembros de la Academia del Cine de Hollywood le dieran el premio grande. El jurado suele buscar una película de consenso y, ante la duda, las polémicas en el reparto suelen venir más por el conservadurismo y el academicismo de las premiadas.

Pero, como bien demuestra Todo a la vez en todas partes, estamos en ese universo en el que, por una vez, la Academia de Hollywood premia el riesgo y la experimentación.

Dónde se puede ver: 

Movistar Plus+, incluido con la suscripción. 

En alquiler: En Amazon Prime (1,99 €); Youtube o Google Play Películas (por 2,99 €); o Apple TV (por 3,99 €).

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