El idilio entre surrealismo y diseño en 280 obras: de Man Ray a Dalí y Gaudí
CULTURA
La Cidade da Cultura acoge la exposición «Obxectos do desexo» hasta finales de agosto
08 abr 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Una plancha llena de clavos, un caballo tamaño real transformado en lámpara, un sombrero con forma de moldes para tarta, una silla cuyas patas son ruedas de bicicleta, un peine con pelos, un anillo con una piedra de azúcar a modo de diamante. Son solo una muestra de las obras que ocupan la segunda planta del museo Gaiás formando parte de Obxectos do desexo, la exposición que refleja el impacto del surrealismo a lo largo de más de un siglo y su estrecha relación con el diseño. Un recorrido desde el año 1924 —momento en el que se presentó oficialmente el movimiento con el Manifiesto del surrealismo de André Breton— hasta la actualidad con creaciones de Man Ray, Le Corbusier, Salvador Dalí, Giorgio de Chirico, Ray Eames, Meret Oppenheim, Antonio Gaudí, Claude Cahum, Gae Aulenti, Ingo Maureer y Gaetano Pesce, entre otros artistas.
«A exposición é unha oportunidade única en Galicia para poder ver como se desenvolveu o surrealismo, que é un dos movementos máis importantes e influíntes dos últimos cen anos na historia da arte, así como no deseño, na arquitectura, na literatura e no pensamento en xeral», destacó el historiador de arte y divulgador cultural Miguel Ángel Cajigal sobre Obxectos de desexo. Surrealismo e deseño 1924-2020, un proyecto que recala en Santiago hasta el 28 de agosto fruto de la colaboración entre la Xunta, la Fundación “la Caixa” y el Vitra Design Museum de Alemania, uno de los centros más importantes del mundo en el ámbito del diseño y que se halla en la localidad alemana de Weil am Rhein, en la frontera con Suiza y muy cerca de Basilea. Cajigal resalta que uno de los aspectos destacados de la muestra es que muchas de las piezas exhibidas nunca antes se pudieron ver en Galicia y son difíciles de encontrar en otras propuestas expositivas. Cajigal también puso énfasis en la reivindicación de la presencia femenina en el movimiento, con algunas de sus grandes creadoras como Oppenheim.
Los objetos, pinturas, esculturas, carteles, revistas, libros, fotografías y películas que desde este viernes pueden visitarse en el museo Gaiás están organizados en cuatro bloques temáticos. El primero, Soños de modernidade, explora los inicios del surrealismo a partir de la década de los años 20 y su influencia en el diseño de interiores y el cine. Ahí dan la bienvenida al visitante una silla de Gaudí, «que non era surrealista pero si foi un precursor», y la obra de Man Ray que coloca clavos en una plancha convirtiendo un instrumento útil en inútil. También se incluyen obras de Le Corbusier, un exponente al mismo tiempo de la arquitectura racionalista. «Esta mostra tamén desmonta mitos. O racionalismo e o surrealismo conviven de maneira natural», resalta Cajigal. Pueden verse, además, obras para Disney de Salvador Dalí, una mesa de ajedrez de Noguchi o piezas de Ray Eames, una de las mejores diseñadoras de la historia.
Imaxe e arquetipo es la segunda parte de este recorrido. En ella se profundiza en el componente absurdo, en lo confuso y el azar que artistas y diseñadores emplean para alterar lo cotidiano. Ahí aparecen objetos que pierden su función para convertirse en otros completamente diferentes, como el caballo a tamaño natural transformado en lámpara de Front, la famosa pipa de Magritte convertida en mueble bar, o un sillín de bicicleta que pasa a ser un taburete. También en este apartado destaca un óleo de Giorgio de Chirico, autor difícil de disfrutar fuera de Italia.
El tercer apartado está dedicado a Surrealismo e erotismo, donde se profundiza en la huella que temas como el amor, la sexualidad y los roles de género dejaron en el universo surrealista. Ahí se ve como el cuerpo femenino fue inspiración. También se exhiben fotografías realizadas por mujeres artistas, entre ellas, Claude Cahum, que en los años 20 se retrataba a sí misma como hombre. En esta parte figuran una reproducción del retrato de Mae West y el sillón de los labios elaborados por Dalí.
Cierra el recorrido O pensamento salvaxe, donde se descubre la relación entre etnografía y surrealismo, además de recoger técnicas como el flujo libre de la conciencia o la escritura automática. Algunos ejemplos son una estantería-cabaña o un árbol transformado en estantería.
La exposición -comisariada por Mateo Kries, director del Vitra Design Museum- fue inaugurada este jueves por el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, junto a la jefa de operaciones del Vitra Museum, Sabrina Handler, y la responsable territorial de la Fundación “la Caixa”, Susan Santos, entre otros.