Penélope Cruz: «Mi conexión con Pedro es tan fuerte que no puedo mentirle»

M. Estévez LOS ÁNGELES / COLPISA

CULTURA

Penélope Cruz
Penélope Cruz DAVID SWANSON

Candidata por su papel en «Madres paralelas», asegura sentirse «muy afortunada» por todo lo que ha conseguido

26 mar 2022 . Actualizado a las 22:19 h.

La pareja española formada por Penélope Cruz y Javier Bardem hace historia. Los dos cuentan ya con estatuilla, pero acuden a la gala de la 94.ª edición de los Óscar como candidatos a mejor actriz y actor protagonistas, respectivamente. Es ella la que goza de más posibilidades de llevarse el galardón por su Janis, una fotógrafa que se queda embarazada mientras lucha por exhumar los restos de sus antepasados en el filme Madres paralelas, de Pedro Almodóvar. Con el Óscar a mejor actriz de reparto en el 2008 por Vicky Cristina Barcelona, se convirtió en la única intérprete española nominada y ganadora. Si se alza con el trofeo, lo compartirá con todas las madres que se enfrentan al horror de la guerra en Ucrania.

—Su relación creativa con Pedro Almodóvar es una de las más fuertes del cine moderno.

—Con Pedro la conexión es tan fuerte que nunca puedo mentirle, ni en el set ni en la vida. Lo descubrí después de ver Átame, y fue un momento decisivo en mi vida porque, con la intención de intentar participar en una de sus películas, iba a cines o bares donde sospechaba que estaría. Ahora, le estoy muy agradecida por presionarme, por su confianza, por imaginarme haciendo cosas que ni yo imagino. Es lo mejor que te puede dar un director.

—¿Disfruta del éxito?

—Me siento afortunada por todo lo que he logrado, pero también me torturo porque me exijo mucho. Disfruto con la investigación y el misterio de descubrir quién es la mujer que encarnaré.

—¿Trabaja con la misma dedicación de cuando empezó?

—Mi ritmo es diferente en esta etapa, pero sigo teniendo la misma emoción que cuando tenía cuatro años jugando con los vecinos. Sabía desde muy joven que quería ser actriz, desde que mis padres me inscribieron en clases de ballet clásico, cuando tenía 6 años. Poco después, me compraron una betamax y descubrí a Meryl Streep o Al Pacino.

—¿El proyecto de «Madres paralelas» se gestó en la pandemia?

—Sí. Me contó hace 12 años la idea de la película. Es algo que hace. Tiene una idea y me la cuenta, y unos años después me envía un guion. Puede suceder de diferentes maneras, todas mágicas. La primera vez que compartió conmigo algo sobre esta historia, estábamos en Nueva York haciendo promoción para Todo sobre mi madre. La historia luego cambió, evolucionó mucho hacia otra cosa. Pero esa fue la raíz. Confinados en Madrid, hicimos una de nuestras videollamadas y dijo: «He sacado esta historia del cajón y estoy pensando en ti para el personaje».

—Fue una grata sorpresa.

—Me lo dijo en pleno encierro, cuando no sabíamos hasta cuándo íbamos a estar metidos en casa ni cuál era el futuro ni qué iba a pasar. Su guion me dio una inyección de esperanza. Saber que tenía un plan en el horizonte me animó. Me dio fe en volver a salir y llevar una vida normal, aunque no sabíamos si era para uno o cinco años después. Pero siempre recordaré esa llamada. Luego siguieron otras en que compartió sus historias conmigo en circunstancias extremas y esas llamadas se convirtieron en mis favoritas. Un salvavidas.

—¿Cree que Almodóvar adapta sus personajes para usted?

—No estoy con él cuando escribe, aunque siempre está escribiendo. Incluso cuando viajamos de promoción. Siempre tiene tres guiones en su cabeza. No sé cómo, pero es así desde que lo conozco. Pero creo que es más feliz cuando filma, y lo entiendo, porque me sucede igual.

—Parece que a usted le cuesta cada vez más trabajar.

—Tengo una vida que me hace muy feliz, pero aun así, aunque tenga hijos, que me obsesionan y son lo mejor que tengo, disfruto con mi trabajo. Soy una persona orientada a la familia. Siempre he sido así. Valoro mucho mi tiempo en familia y educar a mis hijos es mi prioridad. Llevo trabajando desde que tenía 16 años y sigo disfrutando con ese sentimiento de levantarme por la mañana e ir al rodaje. Me hace sentirme completa. Pedro es mucho más feliz cuando trabaja. Siempre le digo: «Todos los veranos tenemos que grabar». Escribe en invierno y filmamos en verano. Le gusta rodar en el verano.

—¿Cómo prepara sus papeles?

—Para ponerme en el lugar de un personaje, siempre trato de comprenderlo a fondo, incluso sin compartir necesariamente sus decisiones morales. Nunca me pregunto si tenemos algo en común, ese no es el punto.

—¿Diría que este es el Almodóvar más político?

—Pedro toca ciertos temas de una manera que va mucho más allá de la necesidad del debate político. No es lo que busca. Como explica Janis: «Tengo esta misión en la vida de poder honrar a mis familiares, simplemente quiero darles un entierro digno». Es imposible no entender eso.