La relación es de aúpa: El Cid (2004), PsK: Pinocho 3000 (2005), El sueño de una noche de San Juan (2006), Pérez, el ratoncito de tus sueños (2007), Nocturna (2008), Arrugas (2012), Psiconautas (2017) y La gallina Turuleca (2021). En el camino y a punto de podio, se quedaron singularidades como los largos De profundis (2006) y la accidentada Espíritu del bosque (2008), con la respectiva implicación artística de los prestigiosos historietistas gallegos Miguelanxo Prado y David Rubín, además de Memorias de un hombre en pijama (2018) y el corto en la modalidad de plastilina, Minotauromaquia. Aunque ya son agua pasada varias de las marcas que impulsaron tales filmes (caso de Dygra, Bren, Continental, Perro Verde…), la tradición continúa en particular liderada ahora por Abano Producións.
La compañía ferrolana tiene muchos boletos para traerse esta noche otro Goya por Valentina, que narra la peripecia de una niña Down y proyecto personal de su productora-directora Chelo Loureiro, igualmente implicada en la esperada Unicorn Wars, de estreno previsto para este año, a cargo del dibujante ya doblemente goyeado en cortos —además de la mencionada Psiconautas— Alberto Vázquez, y que, sin duda, confirmaría la buena salud de la animación gallega y su liderazgo en el espectro español, al que sin duda no es ajeno el fuerte apoyo institucional y su apuesta por la modalidad.