El museo incide en la conexión de sus fondos y proyectos con la ruta jacobea
14 jun 2021 . Actualizado a las 19:06 h.Se escuchan las campanas, esas que grabó el suizo Roman Signer para una pieza audiovisual mientras recorría los tejados de la catedral compostelana. En el suelo, una línea de piedras levantadas del inglés Richard Long, uno de los artistas de referencia del land art. El camino comienza en la planta primera del CGAC. La nueva exposición del museo de arte contemporáneo compostelano, Camiños I, pone el foco en el hecho de andar, de pasear y, como no, en la peregrinación y en la ruta jacobea. «Se trata de una aproximación al aspecto estético del caminar y el camino, que es también una conexión con la naturaleza y con la propia ruta jacobea», destacó Santiago Olmo, director del CGAC y también comisario de la muestra junto a Alberto Carton.
Camiños I reúne desde ayer hasta el 26 de septiembre obras de una veintena de artistas. Muchas de las piezas que forman parte de esta primera parte del proyecto expositivo son fondos propios del museo puesto que uno de los objetivos de la muestra es «subrayar las conexiones con el Camino de la colección y de los proyectos que el CGAC ha realizado a lo largo de su trayectoria», destacó Santiago Olmo. Por su parte, el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, que hizo un recorrido por la muestra junto a artistas gallegos y los comisarios, resaltó que el Camino también es una fuente de inspiración para los creadores culturales e incidió en el vínculo del museo y la ruta jacobea.
Hay mucho diálogo de piezas en Camiños I. Así se puede ver la evolución de los peregrinos a lo largo de este siglo. Las más de millar de fotos carné tomadas en la Praza do Obradoiro en el 2003 por Roland Fischer para conformar el retrato colectivo Pilgrims contrastan con los retratos que tomó el compostelano Jesús Madriñán en el 2019 durante el tramo gallego del Camino de Santiago. Una ruta jacobea que el visitante a la muestra podrá recorrer a través de las piezas audiovisuales Tres Caminos, once pasos, de Gabriel Díaz, que realizó el Camino Francés, el del Norte y el Mozárabe tomando fotografías cada once pasos para después unirlas en vídeos que alcanzan hasta seis horas. También la belga Sophie Whettnal ofrece su peregrinación en el 2007 desde Santiago a Fisterra a través de una cámara orientada desde su mirada y otra recogiendo sus pisadas.
En la muestra también tiene relevancia la fotografía. Está incluida una de las últimas adquisiciones del CGAC, la imagen del Pico Sacro tomada por Montserrat Soto, Premio Nacional de Fotografía en 2019. También hay series centradas en Santiago de Humberto Rivas y Peter Wüthrich.
Pero el andar de Camiños I va más allá de Santiago y de la ruta jacobea. Lo demuestra la pieza del holandés Guido Van der Werve en la que graba a una persona caminando delante de un rompehielos, o las dos piezas de Hamish Fulton, que construye su obra desde el acto del caminar. Precisamente, en estos momentos, está recorriendo la ruta jacobea en sentido inverso desde Fisterra hasta Hendaya. El resultado, según precisó Olmo, podrá verse a partir del último trimestre del año en el CGAC. No podía faltar tampoco la obra de Manolo Paz, que desde sus inicios buscó el diálogo con la naturaleza.
Camiños I tiene como complemento documentación sobre obras y proyectos de artistas contemporáneos procedentes del Centro de Arte y Naturaleza de Huesca y de la Illa das Esculturas de Pontevedra. Precisamente, en este último caso, se pueden apreciar algunos de los bocetos de obras.