Raquel Seijo: «Si estás bien con seis amigos en una terraza, ¿por qué no puedes en un concierto?»

Javier Becerra
Javier Becerra REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

Raquel Seijo en las oficinas de la promotora que codirige, Sweet Nocturna.
Raquel Seijo en las oficinas de la promotora que codirige, Sweet Nocturna. M.MORALEJO

La presidenta de Festivais Galicia asume que los festivales serán sentados este verano y pide un protocolo concreto para la mayoría de los eventos

03 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El sector de los festivales gallegos estaba viviendo un momento dulce -con llenos, reconocimientos con premios y proyección en el exterior- hasta que la pandemia lo dejó todo pendiente de un hilo. «El año pasado hicimos un sobreesfuerzo brutal para poder sacar adelante los eventos», dice Raquel Seijo (Vigo, 1980) presidenta de Festivais de Galicia, la asociación de incluye a los festivales Sinsal, 17 Ribeira Sacra, Sonrías Baixas, Festival de la Luz, Vive Nigrán, Revenidas, WOS y Underfest. «Los ocho que formamos parte de la asociación, hicimos ediciones reducidas Todo salió bien, pero costó», añade

-Hay directores de festivales que aún no precisan sus aforos y no saben si van a poder acoger al público sentado o de pie. ¿Cuál es la situación actual?

-La Xunta lanzó unas líneas en las que mostraba su intención de abrirse a más público. Incluso podía existir la posibilidad de hacer cosas de pie, imagino que pensando en la verbena. Eso causó revuelto en el sector, porque nosotros creemos, con sentido común, que nuestros eventos no se van a poder desarrollar así. Será otro año más de eventos sentados. Si se aplican las distancias de seguridad con los espacios que tenemos, la mayoría no van a 5.000 personas. Solo hay un espacio así: el Monte do Gozo. Por eso pretendemos que las normas se adapten a la situación de la mayoría, que son eventos que oscilarán entre los 1.000 y 2.000 espectadores. Que se fijen protocolos para esos espacios. ¿Qué los hay en el Monte do Gozo? Perfecto, pero primero tenemos que asegurar que nuestros eventos sean viables.

-Hay una queja latente en el sector: se están equiparando festivales y verbena. ¿Qué piensa?

-La realidad de la verbena es una y la de los festivales profesionales, otra. Nosotros somos empresas que nos dedicamos a esto en exclusiva. Tenemos unos protocolos y un nivel de gasto asociados a nuestros eventos altísimo. Se tiene que tener en cuenta eso. No somos ni asociaciones culturales, ni ayuntamientos, sino empresas con unas cargas añadidas muy importantes.

-Los gastos de producción ahora se disparan con menos público.

-Los festivales antes se desarrollaban durante un período de tiempo largo. Abrías a las cuatro de la tarde y estabas hasta las dos de la mañana. Ahora son dos artistas por día. El consumo de barras, que es una fuente de ingresos de los festivales, baja muchísimo. Ese ingreso pasa a ser simbólico y lo haces casi por un servicio al espectador. Pero la situación actual te obliga a tener sillas, acomodación, señales... Todo eso es un mundo de gastos. Si lo haces bien, el coste es muy alto.

-Se habla, a nivel nacional, de la posibilidad de estar sin mascarilla en espacios exteriores. ¿Sería una solución usar la mascarilla y poderse juntar algo más?

-Las negociaciones irán por ahí. A lo mejor en eventos, como hay más aglomeración, se sigue usando mascarilla pero a una butaca de distancia, que son 50 centímetros. Se ganaría así mucho aforo. O que te puedas juntar. Si estás bien con seis amigos en una terraza, ¿por qué no viendo un concierto todos juntos? Es un sinsentido.

-¿Hay sitio para más festivales en Galicia?

-Creo que habíamos llegado a un equilibro. Cada zona tenía un evento de referencia. Podíamos tener todos nuestros negocio y los eventos saneados. ¿Más? Depende de los formatos. Eventos multitudinarios desde luego que no. El público es el que es.

-Otro tema candente en el sector es el de la igualdad y las cuotas. ¿Qué opina de ello?

-Como mujer siempre he estado muy involucrada en este tipo de iniciativas de visibilización. Y creo que pasa también por poner el foco detrás del escenario. Desde luego es muy importante la visibilización de las artistas femeninas y ahí creo que ya hay un cambio bastante fuerte. Me alegra. Lo estamos encontrando sin buscarlo. Muchas de las propuestas más interesantes que nos llegan son de mujeres. Se nota que está cambiando. Nosotros en el Underfest este año estamos en un 60% de mujeres.

-¿Cerca de la normalidad total?

-Lo hablaba con mi socio, Tibe, estos días. Tanto por el nuestros como por el resto de los festivales, donde ya se nota el cambio, el relevo y la normalidad.

-Pero detrás del escenario, no.

-Sí, esa es la igualdad que me preocupa, porque ahí no la veo. Hay que hacer un trabajo de base y de educación. Es posible ser una perfecta backliner, una técnica de sonidos o una promotora.