«Regreso a Hope Gap»: Cuando la pasión se apaga

miguel anxo fernández

CULTURA

Un buen guion y unas interpretaciones solventes harán de esta película un filme a recordar

08 nov 2020 . Actualizado a las 09:53 h.

Si hay películas que devuelven la confianza en el cine adulto, Regreso a Hope Gap es una de ellas. En lo formal, es académica, el a-b-c de la dirección, la corrección por excelencia -no confundir con la simpleza-, que tiene como director al acreditado guionista William Nicholson (Reino Unido, 1948), autor de una veintena de textos, entre ellos Gladiator (2000) y Los miserables (2012), que se pone a la cámara por segunda vez en su carrera y recurriendo a dos grandes como Annette Benning -se come la pantalla a la altura de una Meryl Streep- y Bill Nighy, en su mejor papel, muy contenido. Ella es una experta en poesía -que está presente a lo largo de la trama- y él un profesor de Historia en secundaria, experto en el tema napoleónico. Tienen un hijo -Josh O'Connor lo borda-, a punto de la treintena, que asiste sorprendido y estupefacto a la ruptura de sus progenitores. Escuchará reproches por ambas partes, mientras asistimos desde la butaca a un espectáculo brillante y la constatación de que cuando el guion es bueno, lo demás sabe a gloria.

Una trama de matrimonio en descomposición no es la primera vez que el cine lo afronta, pero el director se encarga de alejarlo de modelos tan distantes como la disparatada La guerra de los Rose (DeVito, 1989), la trascendente Secretos de un matrimonio (Bergman, 1973), o la tramposa Kramer contra Kramer (Benton, 1979), para acercarlo a la realidad cotidiana. Podemos imaginarnos a cualquier pareja en la piel de la recreada por Benning-Nighy, con ella muy asentada en la rutina como controladora del hogar, también de profundas convicciones religiosas, mientras él es un laico pragmático que pareciera se fuera consumiendo en su caparazón. Rasques donde rasques, la verdad asoma en cada reacción de ambos y de su hijo, en cada diálogo -algunos sobresalientes-, en fin, en un conjunto que hace inexplicable que una obra así no haya logrado mayor repercusión popular e incluso mediática. Que Benning no se colara en los Óscar es sangrante. Que Nicholson no viera recompensado su guion, otro disparate. El tiempo hará de ella un filme a recordar.

«HOPE GAP»

Reino Unido, 2019.

Director: William Nicholson. Intérpretes: Annette Bening, Bill Nighy, Josh O'Connor, Aiysha Hart, Ryan McKen, Joe Citro, Sally Rogers.

Drama.

100 minutos.