La Voz ofrece este domingo «Cobra», una intriga sobre narcotráfico de Frederick Forsyth
CULTURA
La novela se adentra en el escalofriante mundo del negocio de la cocaína
08 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.«Quiero saberlo todo acerca de la cocaína». Las palabras salen de la boca del presidente de los Estados Unidos. El hombre más poderoso del planeta se ha visto sacudido en el transcurso de una cena en la Casa Blanca: una veterana camarera, tras resistir estoicamente toda la velada, no puede más y rompe a llorar; su único nieto, huérfano de una víctima del 11-S, había muerto a los 15 años, un fallecimiento relacionado con la droga. Así se pone en marcha la maquinaria norteamericana para combatir un negocio que mueve una obscena cantidad de dinero y es la causa de un número no menos escalofriante de fallecidos. Y así se pone también en marcha el engranaje de Cobra, la novela en la que Frederick Forsyth se adentra en el turbulento mundo del narcotráfico, que retrata en una intriga cuyo suspense funciona como un mecanismo de relojería.
Cobra es también el nombre en clave de Paul Deveraux, el protagonista de la novela que La Voz ofrece este domingo día 9 a sus lectores por el precio de 5,95 euros, dentro de su colección de grandes títulos de suspense, intriga y misterio. En su día Deveraux fue jefe de Contrainteligencia de la CIA y es el elegido por el presidente para liderar esa batalla contra los carteles de la droga. Lo «liberaron» de la organización del espionaje por ser «excesivamente despiadado» con sus enemigos. «No existe tal cosa. Lo quiero de vuelta», es el dictamen del ocupante de la Casa Blanca.
Puntos de vista
En Cobra, el británico Frederick Forsyth (Ashford, 1938) alterna la acción de los despachos de Washington a los ambientes portuarios en los que buques como el San Cristóbal transporta la cocaína. La novela ofrece diversos puntos de vista, que en su conjunto trazan un retrato global del lucrativo y mortífero negocio. Es un estilo de narración que engancha al lector desde la primera página y en el que Forsyth se mueve como pez en el agua, combinando thriller y reporterismo, un área que conoce bien, como también sabe qué mecanismos utilizan los servicios de espionaje gracias a sus colaboraciones con el MI6. Su novela más famosa, El día del chacal, inauguró en 1970 esa meticulosidad que caracterizan sus libros, perfectamente documentados y repletos de detalles que no solo añaden verosimilitud al relato, sino que descubren al lector un mundo al que hasta ese momento no había tenido acceso.
Forsyth ha aplicado estas técnicas con éxito para convertirse en uno de los autores de intriga más leído y respetado de las últimas décadas. En sus obras ha abordado desde el terrorismo islámico a la caza de nazis, desde conspiraciones internacionales para perpetrar golpes de Estado al secuestro de presidentes. No es de extrañar que sus novelas hayan sido adaptadas con éxito al cine, ya que sus historias son la materia prima para armar películas que combinan el suspense y la acción.
Forsyth ha abordado cada uno de los temas centrales de sus libros como si fuese un periodista de investigación, pero a su olfato como reportero se añade ese conocimiento del MI6 y su formación como soldado (fue piloto de la RAF durante su servicio militar). Pero, sobre todo, interviene su capacidad para estar alerta y detectar buenas historias: por algo una de las últimas está ambientada en el mundo de los piratas informáticos.
Próxima entrega: «Cubridle el rostro», de P.D. James
La próxima entrega de la colección de La Voz, que el periódico ofrecerá el domingo día 16, tiene como protagonista a uno de los inspectores más carismáticos de la novela policial, Adam Dalgliesh. Creado por la británica P.D. James, Dalgliesh se estrena precisamente con esta obra, Cubridle el rostro, ambientada en una mansión campestre donde se comete un crimen.