Mandy Moore: «Este es el Pearl Harbor de las familias»

María Estévez LOS ÁNGELES / COLPISA

CULTURA

Moore, en la gala de los premios Emmy, el pasado mes de septiembre
Moore, en la gala de los premios Emmy, el pasado mes de septiembre MARIO ANZUONI | Reuters

La actriz protagoniza «Midway», el filme de Roland Emmerich sobre la Segunda Guerra Mundial

06 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Mandy Moore lleva décadas luchando por hallar su lugar en Hollywood. Gracias a la serie This is us finalmente ha triunfado con su interpretación de una madre en diferentes etapas de su vida. Este jueves estrenó Midway, la última película de Roland Emmerich, que cuenta la historia de los héroes y las familias que vivían en la base norteamericana, atacada por los japoneses. Parece que por fin la actriz atraviesa un buen momento. Moore estuvo casada con el músico Ryan Adams, de quien se divorció hace cuatro años. A inicios de este año, el artista fue acusado de abuso por varias mujeres y la misma Moore reconoció en el New York Times que durante su matrimonio se sintió sola y sufrió abuso psicológico, llegando a ser insultada por no saber tocar ningún instrumento. Atrás queda esa vida para la actriz, hoy felizmente casada con Taylor Goldsmith.

-Su evolución e Hollywood...

-Siempre confié en que mi camino se iba a desarrollar de una manera coherente. Voy paso a paso en la industria. Me gusta combinar mi carrera de cantante con la de actriz, porque mi música vino primero, pero disfruto con las oportunidades que tengo en el cine. Y en televisión son ya 20 años llamando a las mismas puertas.

-¿Cómo es su personaje, Anne?

-Es una mujer fuerte y valiente. Tienen una hija pequeña, Bárbara. Está decidida a mantener a su familia unida en un momento en que se separan y los esposos alientan a las esposas a tomar distancia durante la guerra. También creo que Anne y Dick son unos verdaderos socios en su relación. Existe un profundo aprecio y afecto mutuo. Y la idea del compañerismo no era un gran tema en las relaciones de los años 40.

-Otro filme sobre Pearl Harbor.

-Sí, pero dedicado a las familias. No es un filme de guerra unidimensional. No solo vemos el aspecto heroico de estos hombres, también parte de sus vidas, con sus familias y esposas. Ofrece una mejor comprensión de por qué están luchando y lo que está en juego. Conoces los mejores momentos de su vida, como el baile de la Marina, o ver a estos hombres con sus esposas y familias en los funerales de sus camaradas.

-Fueron a Hawái a rodar.

-Tuvimos la suerte de filmar en la Base de la Fuerza Aérea Hickam y en la Isla Ford. Solo la sensación de rodar en estos lugares históricos ya me impactó. Era donde vivían las familias de la base durante la Segunda Guerra Mundial, y esas imágenes aportan un nivel de autenticidad que no siempre se logra. Ayuda a poner al público en situación y en el lugar de esos personajes. Te transporta de inmediato al art déco de los ardientes años 40.

-¿Qué destacaría de Emmerich?

-Sus películas son siempre impresionantes visualmente. Nunca había formado parte de algo de esta magnitud. El nivel, el enfoque y la atención por los detalles es algo que puedes esperar de él, pero incluso creo que se multiplica en esta película. El recrear de escenas reales es impactante.

-¿Por qué se involucró en el vestuario del personaje?

-Como actriz son los pequeños detalles los que informan. Y el vestuario de esta película no es la excepción. Esta es mi primera película de época y quería resaltar la figura de la mujer a través de sus atributos. Me divierte.

-¿Por qué es importante contar esta historia en este momento?

-Es oportuna porque estamos contando historias reales sobre héroes reales, hombres que a menudo han sido olvidados, o sus historias han sido tergiversadas. Asombrará al público porque te hace sentir como si todos fuéramos transportados en el tiempo.