La nueva entrega de la saga es una película de terror aceptable y con ciertas dosis de humor negro
16 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Un James Wan -el padre de Saw (2004) e Insidious (2010), dos franquicias que irrumpían con ganas de menear el género- estrenaba en el 2013 Expediente Warren: The Conjuring, que regresaba a una fuente iniciada en los años 70 del pasado siglo, las posesiones diabólicas con El exorcista (1973) como filme seminal aunque poco antes Polanski estrenara La semilla del diablo (1968), que anticipaba el tema sin la truculencia efectista de William Friedkin con la poseída Linda Blair. Wan tomaba los casos reales del matrimonio formado por Ed y Lorraine Warren, dos reputados demonólogos que zurraron a Lucifer por la misma época, y el resultado fue aceptable, en parte por tratarse de hechos tal cual y también por una ejecución formal bastante más cuidada que sus homólogos palomiteros. Por supuesto que esta de ahora se dirige al gremio teen, pero anotemos que lo hace desde una perspectiva de género poco usual. Aunque Gary Dauberman debuta aquí, haber escrito los dos guiones anteriores le capacitaba para no salirse del tono.
La siniestra muñeca del título se ajusta al canon, es repelente e inquietante, pero al tiempo desata una tormenta perfecta de terror cuando la pequeña de los Warren tiene la ocurrencia de quebrantar la norma paterna: liberarla de la caja de cristal en la que fue confinada previa bendición sacerdotal. Annabelle dosificará sus apariciones para ceder a su cohorte de amigotes raros, la ejecución de una ceremonia desmadrada con intención de atosigar a las tres crías. Más allá del tono setentero, bien presente en el tratamiento del color y el trabajo de arte, un mérito añadido es que la acción transcurre durante una noche con los Warren ausentes de casa por un compromiso. Va aceptable de ritmo, algunos trucos están bien rodados y no descarta unas dosis de humor negro, aunque por momentos las protagonistas reaccionan de manera estúpida contra el sentido común, un sentido, claro, que sienta fatal al cine de terror. Pues eso, una montaña rusa de sustos al por mayor en el que acabas pidiendo la hora porque se acabaron.... las palomitas.
«ANNABELLE VUELVE A CASA»
«ANNABELLE COMES HOME»
EE. UU., 2019.
Director: Gary Dauberman.
Intérpretes: Vera Farmiga, Patrick Wilson, Mckenna Grace, Madison Iseman, Steve Coulter, Katie Sarife, Eddie J. Fernandez.
Terror. 106 minutos.