Elena Ampudia: «El feísmo existe, pero poco a poco la gente va tomando conciencia»

Eduardo Eiroa Millares
Eduardo Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

CULTURA

CESAR QUIAN

La nueva decana de los arquitectos gallegos defiende que el colegio mejore su oferta formativa a precios asequibles para los socios de la entidad

14 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Nació en Andorra en 1973, procedente de una familia con raíces leonesas y catalanas. La vida la llevó a Galicia y en la Escola de Arquitectura de A Coruña cursó sus estudios. Elena Ampudia Aixendri se casó en Galicia y desde A Coruña desarrolló todo su vida profesional. Ahora esa la nueva decana del Colexio de Arquitectos de Galicia (COAG) tras haberse impuesto en las últimas elecciones.

-¿A qué ha dedicado su vida profesional?

-Siempre he ejercido como profesional libre, por mi cuenta y colaborando con otros compañeros, con obra muy sencilla y sin nada representativo. Soy una arquitecta del montón, de los que picamos piedra, aunque es cierto que todos la picamos, los de la Administración, los de la escuela, los que ganan premios... Sobre todo he hecho unifamiliares.

-¿Cómo decidió dar el paso de presentarse para el COAG?

-Hace cuatro años se pusieron en contacto conmigo unos compañeros del equipo de Renueva Conga, me ofrecieron la posibilidad de unirme a ellos y me apunté a su idea de colegio, y en esta convocatoria decidimos entre todos que encabezara yo la lista.

-¿Qué idea de colegio tienen?

-Una idea global, sin perder la territorialidad, la representación, sí una visión a nivel Galicia, no local.

-¿Qué temas tiene pendientes el COAG?

-Del modelo económico del colegio, el modelo de cuotas. Ahora teníamos una colegiación por tramos y ese modelo, que se cambió hace seis años mejorando, tiene todavía margen de mejora. Podemos hacer una cuota básica que ofreciera más servicios y no fuera tan cara. Para eso tenemos que llegar a un consenso.

-¿Qué puede hacer un colegio por un arquitecto?

-Nosotros tenemos una colegiación obligatoria. El colegio puede ofrecer una formación buena, de calidad, a un precio razonable. La formación es básica porque la normativa va variando cada poco. También hay problemática con los concursos que hay que resolver.

-¿Qué problemas tienen los concursos?

-A veces hay proyectos que ganan concursos sin cumplir estrictamente las bases. También hay que ver los derechos de autor en los concursos y conseguir que los premios sean dignos, porque presentarse a un concurso lleva mucho tiempo. También habría que ampliar los tiempos de presentación de los proyectos: hay concursos que te dan mes y medio para presentar algo y tres meses para resolver.

-¿Qué puede hacer el colegio por mejorar la arquitectura en Galicia?

-Tenemos que defender una arquitectura de calidad a través de concursos de calidad y con un control sobre los proyectos. Tenemos que involucrarnos en la regulación normativa, porque si te implicas en la redacción, la mejora es sustancial.

-¿Se cuida la arquitectura en Galicia?

-Yo creo que sí, existe el feísmo, pero poco a poco la gente va tomando conciencia. Además, el feísmo pasa en todas partes, lo que tenemos es que concienciarnos de que no se pueden hacer chapuzas.

-¿Por qué existe ese feísmo?

-Muchas veces es un problema de cosas a medio terminar, de no saber y de no tener tiempo.

-¿Cómo está la profesión de arquitecto ahora mismo?

-Estamos algo mejor, pero seguimos estando mal. Hay mucha gente que ha dejado la profesión y los que han tenido más suerte se han ido a otros trabajos, pero que no tienen nada que ver con la arquitectura. Parece que va habiendo más obra, pero no estamos a los niveles que se estuvo, ni mucho menos.

-¿Qué le pedirían los arquitectos a la Administración para mejorar la profesión?

-Sobre todo que mejoren los tiempos de tramitación, mayor agilidad. Es algo de lo que en general nos quejamos todos, tanto a nivel municipal como de la Xunta. Es cierto que a veces los técnicos tienen una carga de trabajo muy grande. Hacen falta más medios humanos. Y sustituir las normas subsidiarias de los 80 que queden, que no son claras cuando hablan de «arquitectura de calidad», aunque en general las cosas están hoy mucho más claras que antes.