«Mia y el león blanco»: He visto un lindo gatito

eduardo galán blanco

CULTURA

La simplicidad de su propuesta y la claridad del mensaje caracterizan la película

14 abr 2019 . Actualizado a las 10:19 h.

Un siglo atrás, había en África 250.000 leones en libertad; ahora quedan menos de 20.000 y al ritmo de extinción actual se calcula que todos podrían desaparecer en veinte años. Pensando en esos datos -que leemos al final de la película-, el experto conservacionista Kevin Richardson contactó con el cineasta francés especializado en reportajes para televisión Gilles de Maistre que en Mia y el león blanco filma su tercera cinta de ficción, dotándola de un evidente tono documental.

Al modo de Annaud en El oso, o de Linklater en Boyhood, durante casi tres años, Richardson y Maistre pusieron a convivir a la casi debutante y joven actriz sudafricana Daniah de Villiers -desde los 11 a los 14- junto a un cachorro de león blanco. Niña y animal crecen juntos a lo largo de la película, hasta que el felino se hace adulto. Es cierto que aquel que sepa algo del mundo animal hallará manipulaciones por un tubo, pero para el común de los mortales la sensación de veracidad está muy conseguida.

La historia es sencilla y ya la hemos visto en otras películas de amistad con niño -o humano- y felino, desde El león hasta Duma, pasando por Nacida libre, la serie Daktari, Napoleón y Samantha o El niño león. La chica protagonista, cuyos padres tienen una granja de animales en Sudáfrica, decide poner a salvo a su hermano animal para evitar que acabe abatido en una de esas cacerías ilegales para reyes y guiris ricos.

La simplicidad de la propuesta es de libro, el mensaje muy claro y la intención del filme loable, así que niños y adultos disfrutan llanamente de la belleza del espectáculo. El mundo entero se envía -o enviaba, parece que la moda se ha enfriado-, vía móvil, cientos de vídeos de lindos y tiernos gatitos. Y eso es lo que tenemos aquí. Hay pocas cosas más hermosas y plácidas que una sana niña abrazando un peluche vivo o un enorme y sedoso león. Viendo esta película no hemos podido evitar pensar en Jessica Chastain arrebujando entre sus senos los cachorritos leoninos de La casa de la esperanza.

En fin, que a Mia y el león blanco le falta historia pero le sobra la belleza que nos ofrece el joven operador Brendan Barnes, pues, sobre el declinar creativo de Sternberg, ya nos dijo el documentalista John Grierson: «Cuando un director muere, al menos suele convertirse en un buen fotógrafo».

«MIA Y EL LEÓN BLANCO»

[«MIA ET LE LION BLANC»]

Francia-Alemania- Sudáfrica, 2018.

Director: Gilles de Maistre.

Intérpretes: Daniah de Villiers, Langley Kirkwood, Mélanie Laurent, Ryan Mac Lennan, Brandon Auret, Lilian Dube, Lionel Newton, Andrew Stock, Paul Davies.

Aventuras.

100 minutos.