«Taxi a Gibraltar», la gracia es un don caro

miguel anxo fernández

CULTURA

Fotograma del filme «Taxi a Gibraltar»
Fotograma del filme «Taxi a Gibraltar»

El segundo filme del guionista argentino Alejo Flah, una comedia que no acaba de funcionar

25 mar 2019 . Actualizado a las 08:08 h.

Es frívolo cargarse el trabajo de un equipo con unas líneas, así por las buenas. Meses, puede que años de trabajo para levantar una película que al finalizar la proyección quizá no cubra expectativas. Aquí el fracaso nunca es huérfano, porque siempre hay un culpable, el director, como en el fútbol el entrenador. Es la segunda cinta del también guionista argentino Alejo Flah. Taxi a Gibraltar se mueve entre dos aguas, que no son necesariamente las mismas que bailamos la crítica. La primera, la comedia de consumo rápido que por lo visto en los últimos años tiene como obligación tener a Dani Rovira en el reparto, aun a riesgo de resultar cargante. La segunda, la voluntad de salirse del carril en cuanto a género: esquema de road movie, dos fulanos antagónicos a los que se suma una chiflada (o casi) y un sueño con pinta de inalcanzable. El de acercarse al Peñón, del que cuentan que está perforado con numerosos pasadizos y en algún lugar oculta una millonada en lingotes de oro. No cuestionaremos la idea porque mala no parece.

Lo que ya no tiene redondeo es su humor, aunque la risa es un autobús que no para en todos los barrios. La idea base recurre a los tópicos: el argentino coñazo que habla y habla para no decir nada, y el taxista cabreado que anda sulfurado desde que se levanta hasta que se acuesta. Entre medio, una mujer mitad nórdica, mitad española, que se las pira ante la nada sugerente idea de casarse con el bruto del pueblo. Lo hilvanan todo para cerrar costuras, pero estas se resisten con algunos quiebros que más se parecen a un slapstick de andar por casa. Cosas de lo más inverosímil, aunque esa licencia le está permitida al género.

Rovira luce un problema de credibilidad, incluso de sobresaturación. Los mismos tics, el mismo careto. Tiene sus fans, claro, que le ven simpatiquísimo, pero hacer comedia no es decir cosas graciosas. Ahí es donde Flah debió trabajarlo más. O, tampoco conviene descartarlo, se tuvo en cuenta el mercado argentino y allí la cosa funcionará mejor. Pudiera ser, pero el enredo, si es redondo, funciona igual en el Nepal que en Australia o en Mongolia.

«TAXI A GIBRALTAR»

España, Argentina. 2019.

Director: Alejo Flah.

Intérpretes: Dani Rovira, Joaquín Furriel, Ingrid García Jonsson, Mona Martínez, José Manuel Poga, José Troncoso.

Comedia.

92 minutos.