Los Scott y el misterio de la botella

Olalla García Rey

CULTURA

26 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Érase una familia que vivía allá donde la playa. Un día estaban los seis hermanos jugando con las olas cuando de pronto...

-¡Mirad lo que hay ahí! -dijo John Scott.

-¿Qué es eso? -preguntó Elizabeth, la más pequeña.

-¡Es una botella con un mensaje dentro! -dijo Peter, el mayor, muy nervioso.

Los Scott volvieron a casa y tiraron la botella al suelo. Esta se rompió en mil pedazos y Karen cogió el mensaje. Este ponía: «¡Soy Riky Phill, necesito ayuda!».

-¿Quien será ese Riky Phill? -preguntó Pam.

-No sé, pero podríamos buscar en Internet -añadió Jane. Después de dos días sin resultados, al tercer día...

-¡Mirad lo que he encontrado! -gritó Karen, emocionada- el viejo corsario Riky Phill está desaparecido, se cree que Johny Drew lo han capturado, a estos se les ha visto en la isla Mcallister.

Los Scott compraron seis billetes de barco y se dirigieron a la isla. Al llegar vieron una casa abandonada y decidieron entrar, porque ese podría ser un buen escondite. Al entrar oyeron unos gritos que venían de abajo. Bajaron las escaleras a toda prisa y encontraron una puerta cerrada con llave.

-¡De ahí vienen los gritos! -dijo Elizabeth.

-¡Soy Riky Phill! Habéis encontrado mi botella! -exclamó un hombre de voz ronca- ¡La llave está fuera , buscadla!

-¡Aquí está! -gritó John.

La metió en la cerradura y... salió un hombre barbudo y flaco.

-¡Corred antes de que nos pillen! -dijo Riki -¡Alquilaremos un barco y saldremos de aquí!

Cogieron siete billetes y al llegar a tierra le preguntaron:

-¿Por qué te perseguían?

-Por este collar de valor incalculable, quieren venderlo y ser millonarios...

-Chicos, ¿qué hacéis con este hombre? -gritó la Sra.Scott.

-¡Mamá! -gritaron todos.

Los Scott le contaron la historia y la madre les dijo:

-Distraedlo mientras llamo a la policía, es un ladrón.

La policía llegó muy rápido y se llevaron al hombre a la cárcel. Al llegar a casa los Scott le contaron la aventura del falso corsario a su padre.

Olalla García Rey. 11 años. Vigo. Estudiante.