«Handia», recreación biográfica de altura

sabela pillado

CULTURA

Historia intimista de gran belleza formal que aúna y funde realidad con leyenda, la película suma a sus logros el hecho de estar rodada en euskera

24 oct 2017 . Actualizado a las 08:09 h.

Posee Handia en sus imágenes un algo de poético, hermoso y calmo, a la par que temperado y distante, que tan bien casa con el propio carácter de la película.

La historia, inspirada en hechos reales y ambientada en el siglo XIX, relata la vida del conocido como Gigante de Altzo, un chico vasco aquejado de gigantismo que de mano de su hermano recorrió Europa como espectáculo de entretenimiento freak, en lo que no era sino su modo de afrontar la pobreza del País Vasco rural tras la Primera Guerra Carlista.

Lo que podría haber sido una suerte de El hombre elefante (David Lynch, 1980) o La parada de los monstruos (Tod Browning, 1932), se aborda en cambio como recorrido vital de dos hermanos unidos indeleblemente en sus destinos. Sus diferentes modos de ver la vida, parejos a la vez que de aspiraciones tan distantes, vertebran un recorrido que avanza hacia caminos inexorables en los que su unión se reafirma con los avatares de una existencia donde la frustración va dando camino a la aceptación o resignación, un recorrido agridulce narrado sin grandes aspavientos, sino como constatación de la realidad de una época y lugar.

Historia intimista de gran belleza formal que aúna y funde realidad con leyenda, Handia suma a sus logros el hecho de estar rodada en euskera, lo que aporta veracidad y origina escenas como el (triste) encuentro con la reina-niña Isabel II. Por favor que nadie incurra con ella en el crimen -aquí no sería otra cosa más que eso- del doblaje.

Y a pesar de que la película parece recrearse por momentos en su propia poética, el conjunto nos habla de historia, política, sociedad, moralidad, pero sobre todo, de familia y de las raíces en la tierra. Una tierra donde el paisaje es un personaje más que en su enormidad acoge el crecimiento sin fin del gigante.