Concepción Cascajosa: «HBO cuida 'Westworld' porque puede ser la heredera de 'Juego de tronos'»

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

CULTURA

emilio moldes

Imparte la charla «Viviendo en serie. La ficción televisiva en el mundo en que vivimos» hoy, a las 12 horas, en FICBueu

16 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Concepción Cascajosa (Barcelona, 1979) es profesora de Comunicación Audiovisual en la Carlos III y directora del Máster en Guion de Cine y Televisión.

-¿Es el cine la víctima colateral de las series?

-Es complicado establecer una relación causa-efecto, pero sí parece claro que la creatividad televisiva da cosas muy interesantes para que pueda consumir un espectador medio, y el cine, para un público más especializado. Y creo que lo que ha ocurrido es que las series se han convertido en la película media, entre Hollywood y las independientes, con presupuesto medio, historias adultas y facilidad de acceso.

-Y precio...

-No lo tengo tan claro, porque las plataformas, que son cada vez más, son de pago. Si todos hablamos más de series es porque ahora es más fácil seguirlas, y si te pierdes un capítulo puedes recuperarlo en la plataforma. La facilidad de acceso es clave para entender lo que está ocurriendo.

-Público y actores, porque hace no mucho ver a un actor de cine en una serie significaba que había bajado su caché.

-Sí, y ahora casi pasa lo contrario. Muchos encuentran en televisión el tipo de papel que no pueden encontrar en cine, aunque el poder del estrellato no funciona igual en ambos. Y esa transacción también afecta a directores, productores y guionistas. Montar una película es muy difícil, y si tienen la oportunidad de rodar... Los actores a veces en el cine se encuentran secuelas y que tienen que hacer lo mismo. Y antes cuando se comprometían con una serie era una decisión muy seria porque era para 7 años, pero ahora puede ser de 6, 7 u 8 capítulos, como Fargo. Y muchas veces pienso: ¿Matthew McConaughey ganó el Óscar por la película o también un poquito por True Detective, que la vio más gente? A veces con películas de prestigio pueden ganar algún premio en un festival, pero no lo va a ver tanta gente.

-Pero en España no nos atrevemos a tocar los temas tabúes...

-Tengo la sensación de que eso está empezando a cambiar. Pero no es tanto por el sector audiovisual como por que la española es una sociedad difícil para trabajar determinadas temáticas en el ámbito de la creación, y en el televisivo mucho más. Hay un miedo institucional total por parte de las cadenas de televisión a trabajar determinado tipo de temáticas. La gran serie sobre corrupción en España es Crematorio, y es del 2011. Y responde a un modelo muy irónico, porque se pudo hacer gracias al apoyo de algunos gobiernos un poco sospechosos de la Comunidad Valenciana. Las series políticas han sido un tema tabú durante muchísimos años, porque hay mucho miedo.

-¿Está cambiando?

-Sí, hay proyectos que están dando un paso más allá. Hay series que han dicho cosas incómodas, como Sin identidad, pero como era un psicothriller no le dábamos importancia. Hay proyectos muy interesantes que saben que cuando lleguen a las cadenas no van a tener posibilidad de continuar, por eso muchos creadores están convirtiendo sus proyectos en obras literarias. Si funciona podrá llegar a serie, pero primero tiene que ser novela.

-¿Cuál es la serie más infravalorada de la historia?

-Battlestar Galactica hizo una aproximación naturalista a la ciencia ficción y quizá sea la que mejor reflejó el clima posterior al l1S.

-¿Y la más sobrevalorada?

-Alguna gente se me va a mosquear: Mad Men. Me parece extraordinariamente interesante, pero las últimas temporadas fueron muy mediocres y autocomplacientes. Y eso que criticaba la levedad de la publicidad, de la forma, de las apariencias. Pero a veces era más forma que sustancia. Por momentos estaba demasiado encantada de conocerse, siendo una crítica de eso.

-Hay una necesidad constante de encontrar una súper serie.

-Genera hábitos, un lugar en el que estás a gusto, y cuando termina, un vacío que quieres llenar.

-¿Qué tiene «Juego de tronos»?

-Tiene una combinación muy particular entre una narrativa extremadamente sofisticada y compleja, y a la vez es una serie de aventura, acción, con mucho sexo y violencia. Apela a las dos vertientes: es una serie muy cerebral y un divertimento.

-¿Cuál va a sustituir a «Juego de tronos» cuando termine?

-Westworld me recuerda a ella. HBO ha cuidado mucho el producto pensando que puede ser la heredera de Juego de tronos.