La dibujante gallega ofrece material inédito de la segunda parte de la obra que publicará este año
02 oct 2016 . Actualizado a las 11:29 h.«Hay material inédito, porque el cómic Bella Muerte II se publica en diciembre; habíamos planteado sacarlo en verano para que estuviera listo con la exposición, pero ya se sabe cómo son los plazos de impresión y edición. Por eso he querido poner aquí un avance, spoilear un poco». Esto decía ayer Emma Ríos (Vilagarcía, 1976) en la sede de la Fundación Luis Seoane. Allí estrenó la exposición Bella Muerte, organizada por el Festival de Cinema Fantástico da Coruña (FKM), en su octava edición.
Detallaba la artista que, además, está también presente su última obra, I.D. (Astiberri), que va sobre identidad, de donación de cuerpos: «Son tres personas que se están planteando hacer un trasplante para alargar sus vidas -relata-. Es una especie de cuento en clave de ciencia ficción acerca de la identidad y de cómo te sientes, cómo te perciben los demás y cómo te percibes tú». Frente a Bella Muerte -realizada en colaboración con Kelly Sue DeConnick-, este es un trabajo escrito y dibujado por la autora, «una historia bastante especial» y que le «apetecía mucho incluir aquí». Asegura asimismo que para el diseño de esta muestra de 72 obras originales, que podrán verse hasta el próximo 27 de noviembre, «ha sido bastante especial poder dibujar en las paredes y montarla como me ha dado la gana. Hay intervenciones murales en la entrada y a lo largo de toda la exposición porque lo que me interesaba era que tuviese algo de narrativa». Y es que, enfatiza, «un cómic se lee, no solo se mira, y entonces me preocupaba llevar eso al museo de alguna forma. Y por eso he trabajado con la composición en las paredes y con las intervenciones directas».
El cómic en los museos
Reconoce que cada vez está siendo más habitual llevar el cómic a los museos y menciona varios ejemplos. En su opinión, este arte (u oficio) «está adquiriendo más peso a nivel cultural e intelectual en este país y sobre todo en los últimos años en los que ha pasado a venderse en las grandes superficies. Cuando yo era pequeña se pensaba que el cómic era solamente una cosa para niños».
Ríos explica que, aunque vive en Galicia, su carrera está centrada en Estados Unidos «porque en España, aunque hay un escenario muy interesante a nivel de creación, todavía no se lee lo suficiente como para que un autor pueda vivir únicamente de cómic; bueno, y de literatura, tampoco». En cambio, en América «se considera al cómic un medio que está a la altura del cine».
Eso sí, rechaza el papel de pionera: «Hay bastantes mujeres que hacen cómic, lo que pasa es que se tiene la percepción de que no hay». Y señala una tendencia: «Ahora mismo las lectoras se han convertido en el target de la audiencia del mercado para las grandes editoriales como Marvel o DC, que ahora están lanzando sus productos con un márketing de feminismo porque hay muchas lectoras que se dejan mucho dinero en cómic aunque parezca lo contrario».
El próximo año lo dedicará a cerrar la tercera entrega de Bella Muerte y a un nuevo libro, Mirror, que ahora está en fase de escritura y en el que colabora con una artista malaya que se llama Hwei Lim. Explica que pasará un tiempo antes de que se publique aquí: «Para las ediciones españolas, como normalmente escribo en inglés, tengo que reescribir y traducir», aclara. Y lo hace ella, dice, porque se siente un poco ridícula teniendo que emplear un traductor para verter sus propias palabras a su «idioma natal».