La Fundación Barrié acerca a Galicia al Sorolla paisajista de tierra adentro
CULTURA
Una muestra de 67 pinturas del artista valenciano festejará los 50 años de la entidad
16 sep 2016 . Actualizado a las 10:39 h.La Fundación Barrié prepara a lo grande la celebración de sus 50 años de actividad. Traerá a Galicia la exposición Sorolla tierra adentro, que aborda una faceta poco conocida del universal artista valenciano -el paisajismo más allá de sus famosísimas escenas de mar- e incorpora piezas de los fondos de la Fundación Museo Sorolla y el Museo Sorolla, que, por cierto, ha acogido la exhibición de un embrión de este proyecto entre el 9 de febrero y el 5 de junio (y hubo de ser prorrogada hasta el 9 de octubre). El próximo 4 de noviembre quedará inaugurada la muestra en la sede coruñesa de la Barrié, y podrá visitarse hasta el 26 de febrero del 2017. Integrada por 67 pinturas, acercará a los gallegos una pintura de paisaje en la que Joaquín Sorolla (1863-1923) abandona momentáneamente las playas del Mediterráneo para recorrer «tierra adentro» el campo y algunos pueblos y ciudades de España. La jornada de inauguración incluirá una conferencia a cargo de Carmen Pena, comisaria de la muestra y crítica de arte.
Además, gracias al convenio firmado para esta exposición, la Barrié colaborará en el programa de catalogación del fondo de fotografía antigua del Museo Sorolla (con más de 6.000 imágenes) y realizará un programa didáctico y la edición de un catálogo.
Aunque el género del paisaje fue considerado menor por los académicos hasta entrado el siglo XIX, lo cierto es que posee una rica historia y jugó un papel central en el desarrollo de la pintura moderna. De hecho, entre los realistas se situó en la vanguardia en el ámbito de la innovación y la experimentación.
Para Sorolla, en particular, el trabajo al aire libre y en plena naturaleza fue fundamental en su trayectoria. De todos son conocidas sus estampas de luz intensa en el litoral mediterráneo, pero no ocurre así con sus escenas tierra adentro. También lejos del mar ejecutó un paisajismo de gran calidad y relevancia. Es más, estos paisajes interiores lo introducen de lleno en las inquietudes artísticas del realismo final y también en las corrientes intelectuales renovadoras de la Institución Libre de Enseñanza y los regeneracionistas. Sorolla apreciaba el realismo francés y en sus viajes a París conoció las versiones realistas del luminismo, el impresionismo y el posimpresionismo, que él interpretó a su manera y en el marco de la estética renovadora del paisaje español.