La luz única de Vittorio Storaro

eduardo galán blanco

CULTURA

El principal problema de «Café Society» reside en el actor Jesse Eisenberg: envarado, antipático, cruce imposible de unos mozos Joseph Cotten y Jean Louis Trintignant, pero sin su talento

31 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El principal problema de Café Society reside en Jesse Eisenberg, actor que encarnó al inventor de Facebook en La red social. Envarado, antipático, cruce imposible de unos mozos Joseph Cotten y Jean Louis Trintignant, pero sin su talento.

Si conseguimos obviar la falta de carisma del intérprete principal, la nueva de Woody Allen es otra encantadora comedia agridulce sobre la vida impredecible, el enamoramiento y el aprendizaje sentimental, con una esplendorosa primera parte ambientada en el Hollywood de la segunda mitad de los años treinta, adonde llega el joven judío del Bronx -trasunto de Allen- buscándose la vida y leyendo guiones para su tío, el representante de actores Steve Carell. Los dos están enamorados de la misma mujer, encarnada por Kristen Stewart, la chica de Crepúsculo, hasta hoy actriz de segunda, pero que aquí luce intuitiva y creativa, dándole a cada secuencia un toque imprevisto.

La segunda parte del filme, con la joven pareja ya rota, se desarrolla en Manhattan. Ahí destacan las fabulosas conversaciones maritales de los padres del protagonista, excepcionales Jeannie Berlin y Ken Stott Y también una refulgente Blake Lively vestida de rojo, con presencia de diosa, digna del Hollywood clásico.

Y Vittorio Storaro, últimamente medio retirado, fotógrafo de Apocalypse Now o de El último tango en París, iluminando atmósferas llenas de sentido destinadas a trascender. La luz dorada de Los Ángeles, encendiendo el semblante de Stewart en arrebatadores travellings de aproximación. O la explosión ocre de Manhattan, con la límpida faz de Lively acariciada por las velas.

La pareja Eisenberg-Stewart a la puerta de los legendarios cines angelinos Vista Theatre y Teatro Chino de Grauman, que aún son supervivientes de aquellos años. El beso junto al puente Bow en Central Park. Y el encadenado melancólico de los rostros de los amantes, separados para siempre, que se recuerdan en el barullo de un Año Viejo. O sea, otra vez Annie Hall, casi cuarenta años después. O cuarenta antes. Seguramente peor, pero igualmente hermosa.

«Café Society»

EE.UU., 2016. Director: Woody Allen. Intérpretes: Jesse Eisenberg, Kristen Stewart, Blake Lively, Steve Carell, Corey Stoll, Jeannie Berlin, Sari Lennick.

Comedia dramática. 96 minutos.