El dibujante David Pintor ilustra una edición italiana del «Quijote» para niños de más de nueve años

H. J. P. REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

david pintor

El artista gallego confiesa que le queda una espina clavada, hubiera preferido que la invitación para pintar el ingenioso hidalgo hubiera llegado desde España

18 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

«Parece que uno no posee una carrera de ilustrador completa si no tiene la oportunidad de abordar ciertos clásicos de la literatura», admite el dibujante gallego David Pintor (A Coruña, 1975), que acaba de presentar la publicación del trabajo que hizo para la adaptación italiana del Quijote para niños de más de 9 años que realizaron, con motivo del cuarto centenario de la muerte de Cervantes, Silvia Roncaglia y Sebastiano Ruiz Mignone. Fue un encargo de Lapis Edizioni, para los que ya había preparado el año pasado -también con Roncaglia y al hilo del 150.º aniversario de su aparición- una particular versión de Alicia en el país de las maravillas. «Es una colección que está funcionando muy bien, de una editora pequeña pero que está creciendo, y que llega muy bien a los escolares italianos», explica Pintor, que confiesa que le queda una espina clavada: hubiera preferido que la invitación para pintar el ingenioso hidalgo hubiera llegado desde España. Aunque Cervantes provoca el normal respeto, dice, el Quijote es una obra que todo ilustrador quiere afrontar, que motiva «no solo por su importancia sino también por la gran variedad de personajes, escenarios y situaciones que ofrece».

Pintor relata que ha gozado de total libertad para encarar el proyecto y que, al trabajar con el texto de la adaptación ya listo, apenas ha tenido necesidad de hacer un par de consultas con los autores vía correo electrónico.

Como referencias, apunta que únicamente revisitó las míticas ilustraciones de Gustavo Doré, que, en el gran contraste de estilos, tan alejados, le resultó iluminador en su tarea, sobre todo a la hora de enfocar los personajes.