«No hacemos teatro para discapacitados. Solo es teatro»

Francisco Espiñeira Fandiño
FRANCISCO ESPIÑEIRA REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

PACO RODRIGUEZ

La actriz Blanca Marsillach, que estrena en A Coruña su montaje «Textos de Chéjov», apuesta por «la integración real»

10 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El auditorio coruñés de Afundación, en el Cantón Grande, será escenario mañana viernes, a partir de las 10.30 horas, de una de las cinco paradas que en España hará el montaje teatral Textos de Chéjov, dirigido por Blanca Marsillach y ejecutado con la colaboración de la Fundación Repsol y Varela Producciones, la compañía de la reputada actriz. La obra consta de dos piezas, El oso y Petición de mano, interpretadas por un grupo de jóvenes con discapacidad, que comparten experiencia con actores profesionales bajo la dirección de Xabier Olza. «Es muy importante que estos proyectos se mantengan para avanzar en la integración de las personas», pide Marsillach.

-¿Qué busca con este nuevo montaje teatral?

-Básicamente, es un proyecto en el que llevamos ya varios años trabajando y que pretende buscar la máxima integración en el mundo de las artes escénicas de las personas con algún tipo de discapacidad. No hacemos teatro para discapacitados. Hacemos solo teatro. Todos somos personas y todos tenemos algún tipo de discapacidad, pero hay que saber superarlo y demostrar el talento de cada uno.

-¿Y eso cómo se hace?

-Yo solo conozco una fórmula: que todas las personas tengan las mismas oportunidades de subirse a un escenario y desarrollar sus habilidades interpretativas.

-Chéjov no parece un autor demasiado representado en ese tipo de circuitos. ¿Por qué lo eligió?

-La representación consta de dos piezas, de unos veinte minutos cada una. Y Chéjov es un autor maravilloso. Claro que podía haber elegido algún texto de mi padre, pero leímos las dos obras y nos parecieron un excelente punto de arranque.

-¿Por qué?

-Porque son piezas muy divertidas, donde los actores y actrices se ven muy sexis, que a ellos les gusta mucho verse así también. Y le da un toque muy especial al conjunto del proyecto.

-A estas alturas, ¿qué es lo que más le ha sorprendido del trabajo de sus actores?

-Lo que puedo decir es que todos los participantes en el montaje son actores como la copa de un pino. No se trata de hacer grandes distinciones, pero me gustaría mencionar expresamente a Xavier Olza, que es un trabajador social que colabora en el desarrollo de los talleres teatrales y del que solo puedo decir una cosa: es de lo mejor que hay en el panorama teatral español.

-¿Por qué hay que ir a ver su representación teatral al auditorio de Afundación?

-Hay muchas razones, pero fundamentalmente porque los espectadores van a interactuar con nosotros y se lo van a pasar muy bien. Porque van a disfrutar de unos actorazos fantásticos y, sobre todo, porque nos vamos a reír y divertirnos mucho.