El Parlamento apoya que el documento se sume a la Memoria del Mundo
25 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La Unesco dispone de un registro que lleva por nombre Memoria del Mundo, en el que Galicia no existe. El propósito de esta lista es compilar los archivos históricos, grabaciones y obras documentales de especial interés para la humanidad, como el pliego original de la Declaración de los Derechos del Hombre de 1789, aprobada en Francia tras la toma de la Bastilla, o el Tratado de Tordesillas de 1494, mediante el cual España y Portugal se repartieron el mundo.
Galicia no está, pero el Parlamento gallego respalda que se subsane la falta, pues ayer aprobó por unanimidad una iniciativa instando a la Xunta «a propiciar contactos» a todos los niveles para que la Unesco incorpore el Códice Calixtino.
Y es que si hay algún documento que contribuyera a situar a Galicia en el centro, sino del mundo, sí al menos de la cristiandad, sin duda es el citado manuscrito del siglo XII que narra la traslación del apóstol Santiago y el descubrimiento de su tumba, aparte de ser la primera guía de viaje jacobea.
Eso es lo que puso de relieve el autor de la iniciativa, César Fernández Gil (PP), que destacó la «significación» de dicha obra para la humanidad. Claro que tuvo que aguantar la retahíla de reproches de toda la oposición, que emplazó a la Xunta a «protexer» el Códice Calixtino antes de buscar reconocimientos o incluso a arrebatarle su titularidad a la Iglesia.
Pero la discusión no impidió que, al final, todo los diputados pulsaran el botón verde para respaldar una petición por consenso que avala la decisión tomada por el ministro de Cultura, Méndez de Vigo, y el presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, de promover la candidatura del Códice para la Memoria del Mundo de la Unesco. Si lo logra en el 2017, el documento del referencia del Camino estará a la par de obras universales como el Cantar de los Nibelungos, el Diario de Ana Frank o la cinta del llamamiento a la resistencia del 18 de junio de 1940 hecho por Charles de Gaulle desde los micrófonos de la BBC.