Tres cintas españolas acaban con la hegemonía yanki en el 2014

Madrid / Europa Press

CULTURA

El exitazo de «Ocho apellidos vascos» pilló desprevenidos a críticos, productores y a los propios actores.
El exitazo de «Ocho apellidos vascos» pilló desprevenidos a críticos, productores y a los propios actores.

Las películas «Ocho apellidos vascos», «El niño» y «Torrente 5» tiraron de la taquilla nacional, y en Galicia, «A Esmorga», obtuvo cifras de récord

03 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuatro años después el cine español se ha recuperado y amanece en el 2015 en positivo. Estos son los datos que ofreció ayer la Academia de Cine, cuyo presidente, Enrique González Macho, cree que ahora «apunta bien» y que es un orgullo para el talento español haber logrado unas cifras tan positivas. «Eso no nos lo pueden quitar», afirmó Macho.

Las cintas Ocho apellidos vascos (con 56 millones de euros de recaudación) y El niño (16 millones) son las dos películas más vistas durante el 2014 del total de cintas estrenadas, por delante de El amanecer del planeta de los simios (12 millones), de Maléfica (12 millones) y El lobo de Wall Street (12 millones). Por su parte, otra cinta española, Torrente 5 -la tercera película más taquillera en el ránking nacional- consiguió recaudar 10 millones. En clave gallega, fue A Esmorga, de Ignacio Vilar, obtuvo cifras de récord en la comunidad. En su conjunto, el aumento de cuota del cine español, que creció del 14 % en el 2013 al 24,9 % de este año, es para Macho, una subida «psicológica» que va más allá de la recaudación.

González dice sobre la reforma fiscal que «lo que ha habido hasta ahora es descorazonador» y subraya que no ve «la gracia» a haber estado «durante tres años en reuniones interminables para que luego la situación fiscal sea prácticamente igual a la que ya existía». También ha criticado la «incongruencia, absurdo y locura» del IVA al 21 %, cuyo cambio considera «esencial».

Macho cree que existe una incomprensión «muy grande» hacia un sector, el de la cultura en general y el del cine en particular, «muy serio». «Hay una incomprensión muy fuerte y una animadversión que no tiene justificación racional, es puramente anímica y visceral», lamentó.

El presidente de la Academia quiere que la gala de los próximos Goya sea la del «orgullo, la alegría, la ilusión, la diversión y la celebración», algo para lo que cree que existen motivos, pues «por primera vez en muchos años» las películas más vistas del año son españolas. «Con todas las penurias que tenemos, que se haya conseguido esto, es para festejarlo», dijo. La gala volverá a celebrarse en Madrid, y será en sábado, para lograr una mayor audiencia. Sin embargo, Macho no descartó que en un futuro se celebre en otra ciudad. El cine español recuperó el pasado ejercicio espectadores. Así, por las salas del país pasaron 87 millones de personas, un 14 % más que en el 2013. Las salas también incrementaron sus ingresos hasta los 522 millones de euros, un 3 % más que en el ejercicio anterior. Mejoría que ha sido ayudada por la bajada del precio medio de la entrada en torno al 9 % y las políticas de las salas de proyección para atraer al público.