Además, cree que el hecho de que proliferen películas que abordan el terrorismo de ETA, como la suya en clave de humor o desde la visión dramática de Lasa y Zabala, se debe a los momentos de calma y esperanza que se viven en la actualidad.
«Pasa lo mismo que ocurrió cuando murió Franco con las películas sobre la Guerra Civil», señala el director vasco que añade: «Es el momento de contarlo después de lo que hemos vivido».