Sus fans cantaron hasta la afonía tras esperarle en la plaza durante 12 horas
13 ago 2014 . Actualizado a las 11:52 h.Pese al chaparrón que cayó media hora antes de su actuación y que vació por un momento la plaza, Dani Martín llenó María Pita hasta la bandera. Cuatro años después de su primer disco en solitario, las fans que abarrotaban los conciertos de El Canto del Loco siguen fieles a su exvocalista, y desde la siete y media de la mañana acamparon en María Pita para reservar un lugar en primera fila. Muchas le siguen desde su época en el grupo y han acudido a todos sus directos en la ciudad. Tres horas antes de salir a escena, el madrileño les recordaba en Twitter: «Nos debemos una noche», en referencia a aquel concierto programado en el Coliseo que acabó cancelándose porque coincidía con el partido en que el Deportivo se jugaba la permanencia.
Los gritos inundaron la plaza cuando Dani salió al escenario a las 10.25. Arrancó con el tema Emocional, y durante una hora y media el madrileño repasó los éxitos de sus dos discos en solitario, Pequeño y Dani Martín, y también clásicos de El Canto del Loco que pocos se resistieron a tararear.
Hasta los que venían «acompañando a alguien» o «por pasar el rato», murmuraban en voz baja las letras de canciones que son ya himnos de la música popular. Y es que, sobre todo si se ha nacido en los noventa, es difícil no saber de memoria los estribillos de Ya nada volverá a ser como antes o Volver a disfrutar, que tantas adolescentes sentían como propias. Al final, Dani saldó con creces su deuda con la ciudad herculina. Las quinceañeras que llevaban doce horas esperando terminaron afónicas de pedir bises, y el madrileño demostró que, en esta época de tendencias cada vez más efímeras, hay ídolos que sí que logran sobrevivir.