Yoko Ono revoluciona Bilbao

G. N. Redacción / La VOZ

CULTURA

El Museo Guggenheim acoge una retrospectiva que comprende casi 200 obras de una de las creadoras más influyentes del panorama actual

12 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Con la exposición de Ernesto Neto aún muy viva (permanecerá abierta hasta el 18 de mayo), llega a Bilbao sin tiempo para el descanso la artista japonesa Yoko Ono en plena resaca de la fiesta de su ochenta cumpleaños. Hoy se presenta en el Museo Guggenheim para preparar la apertura -el próximo viernes- de la muestra Yoko Ono. Half-A-Wind Show, una retrospectiva que comprende casi 200 obras de una de las creadoras más influyentes del panorama actual y una leyenda en el arte contemporáneo conceptual, la música y el cine experimental, y que se podrá ver hasta el 1 de septiembre. Esta misma tarde Ono (Tokio, 1933), a modo de aperitivo de un amplio y esperado menú, y vetados los medios gráficos, protagonizará tres perfomances ante un auditorio que ha desbordado el aforo: Sky Piece to Jesus Christ, Promise Piece (dos de sus creaciones clásicas) y la más reciente Action Painting, en una nueva revisión que ha realizado de forma puntual para el Guggenheim Bilbao.

En Pieza cielo para Jesucristo, un grupo de voluntarios envuelven con vendas a los miembros de una orquesta de cámara, que ejecuta una pieza musical hasta que se ve obligada a dejar de hacerlo. Pintura de acción, que data de hace dos años, incorpora en Bilbao un mayor número de lienzos: once, de 2 metros cuadrados, que Ono irá pintando con tinta sumi. En Pieza promesa, ejecutada por primera vez en Londres en 1966, la artista japonesa -viuda de John Lennon- romperá un jarrón sobre el escenario y el público podrá participar recogiendo los trozos, con el que se comprometerá a recomponerlo en un encuentro que fijará para dentro de diez años.

Álvaro Rodríguez Fominaya y Jon Hendricks son los comisarios de una muestra que expone la poliédrica y multifacética personalidad artística de Ono -a la que avalan cerca de seis decenios de inquieta actividad creativa, no siempre bien entendida-, y que incluye sus obras más recientes y una nueva versión de la instalación y performance Moving Mountains.