El anciano alemán que tenía 1.400 cuadros de los nazis en su casa no colaborará en su restitución

EFE

CULTURA

Asegura que su padre adquirió legítimamente todas esas obras pictóricas, entre ellas lienzos de Picasso o Matisse

17 nov 2013 . Actualizado a las 13:02 h.

El anciano alemán Cornelius Gurlitt, hijo de un marchante de arte durante el nazismo, no piensa restituir «voluntariamente» a sus posibles propietarios las 1.400 obras halladas en su casa de Múnich, parte de las cuales se suponen expoliadas por los nazis.

«Voluntariamente no voy a devolver nada», afirma Gurlitt, de 80 años, en declaraciones al semanario Der Spiegel, donde asegura que su padre, Hildebrandt Gurlitt, adquirió todas esas piezas legítimamente.

El enigmático octogenario, al que durante días trataron en vano de localizar diversos medios, explica en la entrevista a ese semanario, parcialmente ofrecida en un viaje en tren, que tanto la justicia como la opinión pública han dado una versión «literalmente falsa» del origen de su colección.

La historia de los 1.400 cuadros, entre ellos obras de Picasso, Otto Dix, Matisse y otros grandes nombres del siglo XX, salió a la luz dos semanas atrás, a través del semanario Focus.

Ese tesoro artístico, del que se estima unos 590 cuadros pudieron ser incautados o comprados en condiciones ventajosas por los nazis a judíos que huían del Tercer Reich, fue confiscado a principios de 2012 por la fiscalía de Augsburgo, que hasta la revelación en la prensa no había informado del fenomenal hallazgo.

Tras conocerse la noticia, se sucedieron las pesquisas periodísticas para hablar con el anciano, que, según la fiscalía estaba en paradero desconocido, hasta que finalmente la revista francesa Paris Match publicó una foto reciente, en un mercado de Múnich.

Siguieron a esa imagen varias declaraciones fugaces, apenas un par de frases, en diarios alemanes, a los que el marchante trataba de esquivar explicando que debía ir al médico.

Gurlitt, al que Der Spiegel describe como un anciano que aparentemente no entiende el revuelo creado a su alrededor, afirma ahora al periodista del semanario que su único propósito era «vivir en casa con mis obras de arte».

«Podrían haberse esperado a que estuviera muerto», argumenta, respecto a la incautación de todas esas obras de arte de su vivienda en Múnich, que según él «son lo que más he querido en mi vida».

Arte expoliado por los nazis

Las autoridades alemanas ha difundido hasta ahora un lista de 25 piezas de la colección en internet, pero se espera que la próxima semana se publiquen otros 590 cuadros para acelerar su restitución si se comprueba que es arte expoliado por los nazis.

Las tardías revelaciones sobre el hallazgo han puesto en entredicho la voluntad de la Justicia y las autoridades alemanas por restituir esas obras a sus posibles legítimos propietarios, supuestamente víctimas del nazismo.

El Gobierno de Angela Merkel ha rechazado repetidamente las críticas, en lo que compete a su papel en el caso, y el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, reiteró el viernes que la competencia directa sobre el asunto corresponde a la fiscalía de Augsburgo.

En la primera partida de 25 cuadros, difundidas en el portal de internet www.lostart.del, figuran obras de Otto Dix, Marc Chagall, Henri Matisse, Antonio Canaletto, Eugène Delacroix y Max Liebermann, entre otros.

En el conjunto de 1.400 piezas halladas en la vivienda hay muchos de los autores calificados por el nazismo de representantes del «arte degenerado», que quedaron proscritos de los museos durante el Tercer Reich.