«En general, llevar la contraria me parece una buena premisa»

CULTURA

No faltó quien calificara a Marlango como una «frivolité», un divertimento de Leonor Watling. El tiempo ha demostrado que no era así. A un paso de los diez años de existencia el grupo consolida su propuesta con el salto al vacío que supuso expresarse en castellano y retomar, especialmente en directo, en su formato de trío, el intimismo naif de su primera etapa

18 oct 2013 . Actualizado a las 18:31 h.

Por momentos atempera su dulzura. En otros exhala hechizo y fascinación. Igual que su música. Y sus letras que, ahora en castellano, otorgan a Marlango nueva dimensión. No satisfechos quizá con ser solo un grupo de ambientes ni con sus guiños a la pista, Leonor Watling y Alejandro Pelayo han devuelto a Marlango su vertiente más intimista no exenta de positividad y hedonismo pop. El formato de trío -piano, guitarra y voz- en el que se presentan en Ferrol les va como anillo al dedo.

-Ya han anunciado que las canciones del próximos disco serán también en castellano ¿Tan grata ha resultado entonces la experiencia?

-Sí, mucho. No fue un paso que salió de la nada. Llevábamos varios discos intentándolo. Y el trabajo de terminar las letras en castellano ha sido mucho más duro de lo que yo pensaba. Cuando termino una letra en español tengo la sensación de haber subido al Everest. Pero en directo nos proporcionan una sensación totalmente distinta.

-¿Fue fruto de la naturalidad o en algún momento se sentaron y dijeron si queremos seguir en esto tenemos que cantar en castellano?

-No, ese planteamiento así nunca lo hemos barajado. Tuvo más que ver con el hecho de que llevábamos ya casi diez años y nos apetecía hacer más cosas. Porque además cuando te planteas la música en esos términos casi nunca funciona. Si se supiera cuándo van a tener éxito los discos y por que, seguro que los bancos ya serían productoras.

-Hubo un momento en que dio la impresión que apostarían por la electrónica y por la pista de baile...

-Pero nos fuimos hacia el otro lado. En general llevar la contraria me parece una buena premisa. Al final las canciones son un espejo. Y lo que aparece en el espejo tienes que ser tú mismo.

-Acaba de dirigir un vídeoclip que en realidad es un corto. ¿Es quizá el primer paso de una nueva faceta en su trayectoria artística?

-No lo sé. De momento no lo tengo en la cabeza. Ahora mismo me suena como si me dijeras si voy a hacer parapente. Pero nunca le digo que no a nada. No seré yo la que cierre puertas. Ya te las cierra la vida

-¿Es más impúdico un escenario o un plató?

-[Silencio] Es que un rodaje es la mentira elevada al cuadrado. Puedes esconderte detrás de tu personaje y casi todo viene de fuera. Mientras que en la música la mayor parte de lo que estás haciendo viene de ti. Quizá por eso para mí el escenario es más impúdico.