Cultura negocia con los responsables del evento para la edición del 2016
23 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Santiago de Compostela será la ciudad invitada en la Feria del libro de Buenos en el 2016, si se completan las negociaciones en la Consellería de Cultura e Educación y los responsables de la feria. La feria bonaerense es una de las más importantes de América, la que permanece abierta durante más días y la que tiene un índice de visitantes más alto.
La participación de Santiago de Compostela como ciudad invitada está prácticamente cerrada, y aunque se negoció la posibilidad de que la edición en la que la protagonista fuera la capital gallega fuese en el 2015, desde Cultura se prefirió una fecha con más tiempo para organizar las actividades que lleva aparejadas. La participación gallega en esa próximo edición de la feria será presentada en cuanto se cierren definitivamente las negociones, a finales del otoño o en el invierno próximo.
El sistema de organización que sigue la Feria del libro de Buenos Aires es contar con una ciudad invitada en cada edición, de manera en que en esa ciudad quede representado el país al que pertenece. En la edición celebrada entre el 25 de abril y el 13 de mayo pasados, fue Ámsterdam la ciudad invitada que instaló en el recinto un pabellón especial por el que fueron pasando algunos de los más importantes autores holandeses, entre ellos Cees Noteboom. El pabellón de Ámsterda era un cubo de color amarillo que pretendía evocar los cafés de la capital holandesa como lugar de encuentro de las actividades literarias y culturales. Además de Noteboom, pasaron por el espacio de Ámsterdam otros autores holandeses como Arnon Grunberg, Herman Koch, Marten Asscher y Gerbrand Bakker.
Para el responsable de la misión holandesa en la feria bonaerense, la presencia de Ámsterdam permite a los lectores argentinos acercarse al conjunto de la literatura holandesa, Peter Steinz aseguró: «Lo que más deseamos es que conozcan a nuestros autores, que sirva para acercarlos a sus mundos literarios». También apuntó que acercar la literatura holandesa a la cultura argentina era solo el punto de partida puesto que, además, también llevaron «obra de Van Gogh o de ilustradores como Dick Bruna». Steinz añadió que el ambiente de la feria, el espacio en el que se celebra y las condiciones en genera la convierten en «la más hermosa del mundo».
Los holandeses destacaron la oportunidad que el protagonismo en la feria le concedía al mundo editorial de ese país, interesado en incorporarse al amplísimo mercado del libro argentino. El agente Emile Op señaló en la feria que había mucho interés en publicar en Argentina.