Mafalda se acerca a Ámsterdam, la ciudad a la que se dedica esta edición del encuentro

La Voz

CULTURA

01 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Cuatro pabellones y veintiún días son los tamaños de una cita con el libro que cada año supera el millón de visitantes. Con Ámsterdam como ciudad invitada y Cees Nooteboom como escritor inaugural, las actividades de la feria se suceden sin mucha tregua en los stands en los que se cruzan las últimas publicaciones en España, como la de la versión en castellano de Caballo de oros, de Víctor Freixanes, las firmas de libros de autores españoles como Javier Cercas o Arturo Pérez Reverte, o la presencia de grandes conocidos de los lectores hispanoamericanos como Quino, el autor de Mafalda. El dibujante, que recordó que su padre fue un exilado español, aseguró en su paso por la feria que cuando comenzó creía que se «podía cambiar el mundo con las viñetas, pero ahora creo que no».

Otro de los platos fuertes de la feria fue el Nobel sudafricano J. M. Coetzee, quien participó en la jornada inaugural. Fue el encargado de abrir el ciclo de conferencias magistrales con una intervención que giró en torno a la censura. «Para los escritores sudafricanos, la censura fue un hecho corriente hasta alrededor de 1990, cuando se empezó a desmantelar la legislación creada por el gobierno del apartheid», explicó. A raíz de ello, Coetzee, afirmó, desarrolló un interés por la censura, «no solo por el sistema sudafricano, sino como fenómeno histórico general».