-La película empieza con la frase «Yo sé quién soy». ¿Cuándo se encontró reconociendo eso en su vida?
-Estaba rodando SNL [Saturday Night Live], tenía 20 años y corría hacia mi segundo vídeo cuando descubrí en una esquina a David Bowie vistiendo un traje de tres piezas. Me quede parado. Se suponía que debía presentar la siguiente interpretación de la noche, pero verlo me dejó sin habla y entonces él se acercó y me dijo: «Tú debes de ser Robert». En ese instante me di cuenta que yo ya era alguien.
-¿Cuánto de Tony Spark hay en usted y cuánto de usted hay en Tony?
-Cuando eres un profesional pones una distancia estética con el personaje, y cuanto mayor eres y más aplastas tu ego menos te idenfiticas con cosas narcisistas, gloriosas o profundamente temerosas. Cuanto más real es Tony más cercano me parece.