Los herederos del escultor Asorey piden protección para su obra

Camilo Franco SANTIAGO / LA VOZ

CULTURA

ÓSCAR CELA

Dicen que hay copias de piezas sin control y que las públicas no están protegidas

15 abr 2013 . Actualizado a las 06:00 h.

Los herederos del escultor Francisco Asorey (Cambados 1889-Santiago 1961) piden protección para la obra de quien fue uno de los principales artistas gallegos del siglo XX. Sus herederos señalan dos grandes problemas para la obra de este escultor que se puede ver en muchos espacios públicos gallegos, las copias no autorizadas de las piezas particulares y la falta de conservación de la obra pública.

Carmen Asorey es la nieta del artista cambadés que, junto otros herederos y la puesta en marcha de una asociación con el nombre del artista, están intentando poner orden en un patrimonio que, según explica, «no es respetado ni por las instituciones responsables ni por los particulares».

La familia de Asorey ha comenzado una catalogación «casi manual» de las obras. Lo explica así porque no tienen medios para «enfrentarnos a una tarea tan extensa como la catalogación de toda su obra». Pero tras iniciar el trabajo y recopilar información se han percatado de que no se están «respetando los derechos de autor, de tal manera que en la mayor parte de las ocasiones ni siquiera se pide permiso a quienes ostentamos esos derechos».

La nieta de Asorey se refiere a que las piezas del escultor ubicadas en espacios públicos ven alterada su ubicación o incluso su aspecto «sin que nadie tenga en cuenta a la familia, que, aunque no es propietaria de la obra, es propietaria de sus derechos artísticos».

Explica que para cualquier «movimiento, alteración o incluso limpieza es necesario pedir permiso a la familia, no para que no se haga, sino para que se conserve la integridad de la pieza».

Otro de los problemas detectados por la familia es la aparición de piezas incontroladas de Francisco Asorey. En este caso pueden ser piezas de bronce de las que se han realizado copias sin autorización a partir de los moldes del escultor o a partir de otras piezas. Señala que, en este caso, es mucho más difícil de controlar, pero advierte a los compradores de piezas de Asorey, un artista que se cotiza alto en las subastas, que las piezas deben tener una acreditación que garantice la legalidad de la misma.

Para los herederos, la herramienta clave para acabar con estos problemas es la «elaboración de un catálogo completo de la obra de Asorey, tanto de la pública como de la privada, que certifique qué obras son del escultor y que sirva de guía para estudiosos y coleccionistas. Como punto de partida, se ha abierto una web (www.franciscoasorey.es) en la que se están registrando piezas del artista.