El hijo de Isabel Pantoja asegura que ha encontrado en la música su «verdadera vocación»
07 mar 2013 . Actualizado a las 23:02 h.Como un hombre del renacimiento en versión castiza, Kiko Rivera lleva años picoteando aquí y allá en artes varias como la televisión, el cine, el teatro e incluso la radio. Hasta que dio con el fenómeno disc jockey que tan buen resultado le ha dado a otras caras conocidas como el piloto Fonsi Nieto o el showman Mario Vaquerizo, dos personajes imprescindibles ya en las fiestas nocturnas de las discotecas de moda.
Pero la nueva faceta del hijo de Isabel Pantoja no es flor de un día, sino que asegura haber hallado en la música su verdadera vocación.
«Es mi profesión, lo que me gusta y no te podría descrir con palabras lo que siento. Estoy en casa y hasta mi mujer me dice 'Quillo, deja ya la musiquita'», afirmó ayer en la presentación del que ya es su tercer tema, Chica loca, junto al DJ Dr. Bellido en la sala Oh Cabaret! en Madrid. «Cuando a alguien le gusta algo y lo siente de esta manera no puede parar de darle vueltas al coco, siempre estoy pensando en ideas para la próxima canción, en cómo lo vamos a hacer, con quién...».
Kiko Rivera admite que su exposición como personaje público ha provocado que le costara más encontrar su lugar, con ofertas que llegan desde sectores diversos reclamando apadrinamiento de su causa. «Cuando eres un personaje público te llaman porque la gente quiere ir a verte. En mi caso, por mi personalidad le caigo bien a la gente, no tengo problemas con casi nadie y eso ha hecho que diferentes facetas hayan querido probarme, cine, teatro, la radio también... Pero al final he encontrado lo que me gusta y voy a luchar por ello. Ya salí al extranjero, estuve en Suiza y espero que mis sueños se hagan realidad y que se conozca mi música».
Y hay que reconocer que la elección ha sido un éxito. Después de presentar Quítate el top y Victory -un tema para la Eurocopa 2012-, Chica Loca promete configurarse como el tema 'rompepistas' del verano.
En apenas 24 horas, se colocó en el número uno de iTunes en descargas, y promete no dejar de sonar en las emisoras de radio de aquí hasta después de los retiros estivales. «La verdad es que el tema está pegando fuerte, tiene mucho veneno, como decimos nosotros, es un tema del verano, muy alegre y muy divertido», explicó Rivera, que espera «gualar e incluso superar» el éxito que tuvo el tema con el que se presentó en sociedad tras los platos de mezclas.
La canción está compuesta a seis manos por el propio Kiko Rivera, el DJ Dr. Bellido y Juanma Leal -miembro del grupo Calle Salvador-. «Ellos son las manos que hacen que suene y cuando tenemos una idea, ellos que son los que entienden lo añaden. Estoy aprendiendo mucho sobre producción y me gusta muchísimo, aunque es muy complicado porque se empieza de la nada, creas una base, luego le metes la letra, y luego hay que ir trabajándolo hasta que al final sale Chica loca».
La satisfacción profesional del hijo de la tonadillera se une a la faceta personal, en la que se estrenó como padre de familia en noviembre con el nacimiento de su primer hijo, Francisco, junto a su novia, la modelo Jessica Bueno. «Es un poco complicado compaginar esta profesión con la familia porque trabajo muchos días a la semana, incluídos los fines de semana y ahora los jueves en el Oh Cabaret! -la antigua sala Budha en Madrid-, así que intento pasar el máximo tiempo posible con mi mujer y mi hijo. Nos vemos poco, pero cuando nos vemos es muy intenso».
Pantoja, su mayor fan
Desde que se puso en marcha el fenómeno Paquirrín, Kiko Rivera ha ido cosechando una legión de fans pero también numerosos detractores que no cejan en su empeño de criticar cada una de sus inmersiones artísticas.
«Intento pasar de eso, pero hay mucha gente que por tener su minutito de gloria intentan darte caña para que saltes y le contestes. Hay que pasar de esa gente y estar de buen rollo, el respeto es la base de todo», defendió.
A la cabeza de sus fans se encuentra su madre, Isabel Pantoja, su consejera y principal apoyo. «Ella escuchó el tema antes que nadie y aunque es una música totalmente diferente a la suya le gustó mucho porque es un tema muy bailable, tan alegre y divertido. Mi madre me apoya muchísimo y siempre me ha gustado enseñárselo a ella y a mi tío Agustín, que también se dedica a la música. Entre los dos me dan muchas y muy buenas ideas».