Muere a los 90 años el actor Tony Leblanc

La Voz / EFE REDACCIÓN

CULTURA

Fue uno de los intérpretes más populares del cine español durante décadas

24 nov 2012 . Actualizado a las 22:07 h.

El actor Tony Leblanc ha muerto a los 90 años de edad en su domicilio de Villaviciosa de Odón, Madrid. Murió por la tarde, alrededor de las 16.30 horas, víctima de un fallo cardíaco. La noticia la adelantó la Academia del Cine español en su cuenta oficial de la red social Twitter.

Leblanc, inolvidable intérprete de decenas de películas desde los años 50 hasta los 70 del siglo XX, se llamaba en realidad Ignacio Fernández Sánchez y recuperó popularidad en los últimos años gracias al filme Torrente (y sus secuelas) de Santiago Segura. También por su papel en la serie Cuéntame.

Entre la extensa filmografía de Tony Leblanc destacan películas tan populares en su época como El tigre de Chamberí, Los tramposos o Las chicas de la cruz roja o El astronauta. También fue director de cine, actor de teatro, bailarín y compositor de música. Recibió dos premios Goya. Uno de honor en 1994 por toda su carrera y otro tras su resurrección artística en 1998 por su participación en Torrente, el brazo tonto de la ley como mejor actor de reparto. En 2002 recibió la Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes.

Más de 150 películas en el cine

Ignacio Fernández Sánchez Leblanc nació el 7 de mayo de 1922 en Madrid. Trabajó como botones y ascensorista en el Museo del Prado, del que su padre era conserje. Un empleo que intercaló con el baile, proclamándose campeón de España de claqué en 1942.

Futbolista y boxeador

Debutó sobre los escenarios como figurante de Pastora Imperio y Celia Gámez, hasta convertirse en imprescindible en la comedia española. Antes de convertirse en el reconocido actor que fue, Leblanc inició una carrera en el boxeo, donde también triunfó, como «El Tigre de Chamberí», al lograr en 1943 el campeonato de Castilla de peso ligero.

Compaginó ese deporte con el fútbol -jugó con el Carabanchel C.F., en Tercera División-, pero fue en los platós y los escenarios donde desarrolló finalmente su profesión, a la que tampoco impuso barreras, convirtiéndose en esporádico autor y director escénico además de empresario, como dueño de su propia productora cinematográfica a finales de los años 50.

Al teatro llegó en 1946

Al teatro llegó en 1946 con «Las horas inolvidables», obra a la que siguieron «Doña Mariquita de mi corazón» y «Cinco minutos nada menos». Colaboró con la compañía de Ana Mariscal en «La maravilla errante» (1947) y fue director y primer actor de la compañía de Manuel Paso.

Luis Escobar le brindó varios de sus éxitos sobre los escenarios en el madrileño Teatro Eslava con «Te espero en Eslava» y «Ven y ven al Eslava».

En cine también destacó con «La casa de los Martínez» (1971), «El Tigre de Chamberí» (1957) y «Los tramposos» (1959), esta última dirigida por Pedro Lazaga, junto a Velasco, uno de sus compañeros habituales en el cine.

Retirada en 1975

Con Pedro Lazaga coincidió en ocho ocasiones, entre ellas la que fue su última película antes de decidir retirarse en 1975, «Tres suecas para tres Rodríguez».

Más de dos décadas después, Santiago Segura le recuperó para el cine con Torrente. Este galardón revitalizó una carrera que le hizo repetir con Segura en Torrente 2: Misión en Marbella (2001), y Torrente 3: El protector (2005), dos de las cintas más taquilleras en la historia del cine español.

En el tiempo en el que estuvo ausente de las pantallas y escenarios Leblanc elaboró el guión de la comedia La terrible verdad de mis cuentos y publicó el poemario En la otra orilla de mi vida, además de obtener la Medalla al Mérito Trabajo, en 1980, y superar varias operaciones tras sufrir en 1983 un grave accidente tráfico que le incapacitó durante años.