Robert Pattinson, un Casanova sin escrúpulos en la Berlinae

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CULTURA

Los actores Holliday Grainger, Christina Ricci y Robert Pattinson
Los actores Holliday Grainger, Christina Ricci y Robert Pattinson TIM BRAKEMEIER

El actor presentó, en la última jornada del festival, el filme «Bel Ami», en el que seduce a Uma Thurman, Christina Ricci y Kristin Scott Thomas

17 feb 2012 . Actualizado a las 20:31 h.

En medio del revuelo provocado por la dimisión del presidente alemán, Christian Wulff, la última jornada de la Berlinale se entregó hoy al lujo y al placer con Bel Ami, una adaptación del clásico de Maupassant, en la que Robert Pattinson seduce a nada menos que Uma Thurman, Christina Ricci y Kristin Scott Thomas.

Enmarcada en el exhuberante París de 1890, Bel Ami supone el debut en la gran pantalla del aclamado director de teatro Declan Donnellan, que se rodea de un estelar reparto para esta historia de intrigas, celos, avaricia y, sobre todo, poder de seducción. «En esencia, trata de un gobierno corrupto apoyado por medios corruptos (...) así que obviamente no tiene nada que ver con lo que está sucediendo hoy en día», dijo Donnellan irónicamente.

El exvampiro Robert Pattinson da vida a Georges Duroy, un soldado francés recién llegado de Argelia y pobre como una rata. Un fortuito encuentro con un excompañero le permite introducirse en la crème de la crème de la sociedad parisina donde, ayudado por la influyente Madeleine (Thurman) consigue un contrato para escribir en un diario. En un ambiente donde las mujeres son quienes deciden entre bastidores, Duroy seduce primero a la dulce Clotilde (Ricci), consigue casarse con Madeleine y hace perder la cabeza a Virginie, esposa del editor jefe de su diario. Pero no sabe que hay un complot político hirviendo a sus espaldas.

Acostumbrado a ser perseguido por los paparazzi, Pattinson declaró en una abarrotada rueda de prensa que le resultó «divertido» verse como editor jefe en la sección de noticias del corazón. Y aunque nada más leer el guión se sintió atraído por la «increíble energía del personaje», lo que más le interesó es que Duroy es uno de esos caracteres únicos. «Normalmente, el cine intenta enseñarnos algo, darnos una lección, y sin embargo aquí el protagonista es alguien que nunca se arrepiente, le guía la avaricia y splo busca más y más», explicó. En su opinión, Duroy cree que tiene derecho a ser rico, desprecia la pobreza y desconfía de todos. «Es incapaz de sentir empatía, solo mira por él», señaló.

Pattinson, que en el 2010 fue considerado una de las cien personas más influyentes en el mundo por la revista Time, reconoció entre risas que cuando leyó el guión se sintió «en cierto modo» identificado con el joven soldado perseguido por todo tipo de mujeres. «Es extraño tener un público que prácticamente es solo del mismo sexo, pero a la vez han sido muy fieles y les estoy inmensamente agradecido», declaró.

En este sentido, no descarta volver a participar en otra eventual adaptación de las novelas de Stephenie Meyer que lo lanzaron a la fama. «Tengo curiosidad por ver lo que Stephenie puede estar escribiendo», dijo sobre los rumores de que finalmente saldrá a la luz Midnight Sun, la nueva entrega de la saga Crepúsculo que Meyer abandonó tras unas filtraciones a la Red. «Aunque probablemente soy ya demasiado mayor para el papel».

En ausencia de Uma Thurman, Pattinson y Ricci acapararon todos los flashes y no tuvieron reparos en responder a la pregunta picante de un periodista sobre sus tórridas escenas de cama. «Fue todo tan íntimo y romántico...», bromeó Ricci. Y divertida, la actriz italiana añadió que una velada perfecta pasa por ver entera la saga Crepúsculo.

Pese a que Pattinson no terminó de convencer en su papel de seductor y rompecorazones, la crítica agradeció la ligereza de Bel Ami tras el durísimo drama canadiense War Witch, que puso fin a la carrera por el Globo de Oro con la historia de una niña africana capturada por la guerrilla.