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El «ajuste» para el 2012 en el coliseo madrileño no afectará a la calidad y cantidad de sus producciones sino a las pretensiones económicas de los artistas.
13 dic 2011 . Actualizado a las 20:17 h.Para el 2012, el Teatro Real se ha dotado de un presupuesto de 46,39 millones de euros, un 8,3 % (4,2 millones) menos que este año, y espera reducir su déficit a 500.000 euros, un «ajuste» que no afectará a la calidad y cantidad de sus producciones sino a las pretensiones económicas de los artistas.
El presidente del Patronato de la Fundación del Real, Gregorio Marañón; el director del Real, Miguel Muñiz; y el administrador del teatro, Alfredo Tejero, han detallado hoy los datos económicos del coliseo madrileño para 2012, que tendrá que ratificar ahora el Ministerio de Cultura. Aunque la reunión del Patronato fue ordinaria, Marañón ha destacado las circunstancias «doblemente excepcionales» en las que se ha producido: «Estamos inmersos en un cambio político y en la crisis económica más grave que hemos conocido».
Sobre la «seguridad» de que sus pretensiones sean atendidas, ha precisado que no conoce ninguna institución pública «que tenga al 100 % asegurado que le van a pagar». Los Presupuestos Generales del Estado se aprobarán en mayo o junio y «hay un margen de incertidumbre que antes no había». No obstante, ha añadido, en el Real contemplan los cambios «con absoluta tranquilidad» ya que, al haber convivido con «tres administraciones distintas», lo ven todo «con normalidad».
La aportación de Cultura a los presupuestos del teatro pasa de 15,4 millones en el 2011 a 13,7 en el 2012; la de la Comunidad de Madrid de 5,6 a 4,5 y la del Ayuntamiento de 1,5 a 1,2. En el 2012, el Real reducirá su déficit a cerca de 500.000 euros, una bajada del 64,6 % de la deuda prevista para este año (1,5 millones de euros), a su vez la mitad del que hubo en el 2010, según Tejero.
La bajada de las aportaciones públicas se traduce en la búsqueda de «una mayor eficiencia económica» en el campo artístico. Si en el 2010 ese coste fue de 18 millones, en el 2012 será de 14,3 aunque se mantiene el número de óperas y funciones. La mayor parte de la reducción, ha dicho Marañón, recaerá en la negociación «a la baja» de los cachés de artistas y directores y en la compra de producciones y decorados.
En el 2010, ha detallado Marañón, la diferencia entre los ingresos en taquilla y los gastos de las producciones artísticas fue de 1,7 millones de euros y en el 2012 se espera generar en ese ámbito un superávit de 2,3 millones. También ha crecido «espectacularmente» el patrocinio, hasta los 7,3 millones de euros, tanto que si en el 2004, el Real tenía un 58 % de su presupuesto subvencionado y el resto procedía de esa partida y la actividad propia del teatro, en el 2012 esa proporción se ha invertido.
En el 2004, el Real alquiló sus salas y su escenario para 42 actos y en el 2011 para 62, muchas menos de las que le demandan, lo que le reportó el 33 % de sus ingresos. Dar entrada a artistas como Bisbal, ha bromeado Muñiz, ha sido bueno para mostrar que la ópera «es barata» porque las entradas del cantante pop eran más caras «y se llenó». Las localidades para el concierto del almeriense oscilaban entre los 150 y los 30 euros, una ópera cuesta entre los 172 y los 7 y una producción como la que estrenará sobre la vida de Marina Abramovich entre los 90 y los 7 euros. «Es interesante porque el Real se ha convertido en una marca cotizadísima. Todos quieren estar aquí pero el alquiler no significa el uso del logotipo, aunque no podemos evitar que se presuma de ello», ha comentado Muñiz.
El enorme esfuerzo del Real en las actuales circunstancias, ha reiterado Marañón, es mantener en su integridad un proyecto que se caracteriza por su «extraordinaria calidad, proyección internacional, excelencia de su orquesta y coro, apertura a nuevos públicos y buena gobernanza».